El Consorcio del Parque Natural de la Sierra de Collserola ha iniciado este lunes la tala preventiva de 200 árboles muertos o muy debilitados y con riesgo de caída. Son mayoritariamente pinos piñoneros y están afectados por la sequía y por la plaga forestal del escarabajo perforador.

La actuación se esta haciendo en la zona de la estación de FGC del Apeadero de Vallvidrera, uno de los espacios forestales del Parque Natural donde los efectos de la sequía acumulada son más visibles. Además, se trata de una área altamente frecuentada por público familiar y escolar.

Los objetivos principales de la intervención, que ha empezado este lunes, son garantizar la seguridad de los usuarios, mejorar la estructura del bosque y hacer prevención activa de incendios forestales. Se espera que termine el próximo 15 de marzo.

Durante la actuación, no está previsto cortar el camino de acceso a pie hasta los equipamientos de la zona, solo habrá situaciones puntuales cuando talen árboles o retiren troncos. Además, el espacio estará señalizado. 

La intervención también servirá para reparar mobiliario existente en mal estado, así como para instalar nuevos bancos elaborados con restos de la intervención, siguiendo el modelo instalado en otros espacios del parque.