La Guardia Urbana de Barcelona impuso 16.221 multas a conductores de vehículos de movilidad personal, la mayoría patinetes eléctricos, en 2023, lo que se traduce en una media de 44,4 al día. Así lo señalan los datos sobre denuncias que ha hecho públicos este jueves el intendente Jordi Oliveras, en el marco de la presentación de una campaña de "unos siete días" del cuerpo policial para perseguir las infracciones.

El total de multas el año pasado, sin embargo, fue un 25,2% inferior al de 2022 (21.697). Oliveras ha considerado que esta disminución "responde al hecho de que los conductores de vehículos de movilidad personal conocen más la normativa y, por lo tanto, tienen más disciplina viaria".

El grupo más numeroso de sanciones en 2023 (4.918) a usuarios de patinetes particulares fue por "circular por lugares que no corresponden", entre ellos, las aceras (3.617). Seguidamente, estuvieron las denuncias por saltarse el semáforo (3.672), por ir más de una persona en un mismo vehículo de movilidad personal (2.376) y por conducir con auriculares (2.182).

De las 20 víctimas mortales en accidente de tráfico que hubo en Barcelona en 2023, dos eran personas conductoras de patinetes. Los datos que ha ofrecido el Ayuntamiento también muestran que entre enero y junio del año pasado hubo 13 heridos graves en accidentes de estos vehículos. De estos, nueve fueron conductores; uno, pasajero y tres, peatones.

Miquel Taverna

Durante el primer semestre de 2023 se registraron 6.600 vehículos implicados en siniestros de tráfico en Barcelona, de los que 375 fueron de movilidad personal, menos que en el mismo periodo de 2022 (399).

El año pasado la Guardia Urbana hizo 11 campañas de control a patinetes, una más que en 2022. El objetivo es garantizar la seguridad viaria, reducir la siniestralidad y perseguir las conductas de riesgo.