Las costas gallegas siguen recibiendo millones de pellets cada día. A pesar de las limpiezas que se están llevando a cabo en los arenales por parte de decenas de voluntarios y asociaciones, el mar continúa arrastrando estas bolitas de plástico, que también han llegado a las playas de Asturias y Cantabria. En Galicia, ya se han localizado en muchos puntos de las Rías Baixas, Noia y Muxía.
Estas bolitas venían dentro de unos sacos de 25 kilos cada uno y que pertenecían a la empresa polaca Bedeko Europe. Estaban siendo transportados por el buque Toconao que, mientras navegaba por la costa portuguesa el 8 de diciembre, perdió varios contenedores. En total, cayeron al mar cinco contenedores. Uno de ellos portaba 26,25 toneladas de pellets repartidos en 1.050 sacos.
Los otros cuatro contenedores perdidos transportaban neumáticos, barras de aluminio, neumáticos y rollos de papel film. Así lo informado la Delegación del Gobierno en Galicia, que recibió el aviso de Maersk, armadora del carguero con bandera de Liberia y registrado con el número IMO 9627899.
Elevado al nivel 2 de emergencia en Galicia
La Fiscalía de Medio Ambiente ha abierto una investigación este lunes por la marea de pellets de plástico tras abrir previamente un expediente de seguimiento de la situación el pasado 4 de enero. La semana pasada, el conselleiro do Mar de Galicia, Alfonso Villares, confirmó que los microplásticos ya estaban llegando a la asturiana y la cántabra.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha asegurado que "si es el requisito que nos están pidiendo" para que el Gobierno central colabore en la limpieza de estos residuos plásticos -en referencia al nivel 2 de emergencia-, "no tenemos ningún problema en hacerlo".
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