Leonor de Borbón se ha desplazado al Pirineo de Huesca con sus compañeros de promoción de la Academia General Militar de Zaragoza para realizar un plan de instrucción de montaña y esquí que durará hasta el miércoles, tal y como ha informado el periódico Heraldo de Aragón.
El periódico publica una serie de fotografías tomadas a pie de pista en Astún, junto a una nutrida tropa de compañeros. Todos van ataviados con trajes de camuflaje aptos para la nieve, cascos, mochilas voluminosas y esquíes.
Los alumnos de la Academia llegaron el pasado domingo a la localidad e Jaca, donde se encuentra la Escuela Militar de Alta Montaña. De allí, la expedición fue al campamento que tiene la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales (Emmoe) en la parte alta de la estación de Candanchú (Huesca).
De Candanchú, se han movido a las pistas de la vecina Astún para la instrucción de esquí junto al resto de cadetes. Este es un centro de enseñanza de perfeccionamiento en el adiestramiento en montaña y operaciones especiales. Referente para las Fuerzas Armadas, imparte cursos especializados para diferentes ejércitos nacionales y extranjeros de nieve y aludes, rescate y autorrescate, mantenimiento y reparación de material o medicina de montaña.
Leonor es una experimentada esquiadora, afición que le ha inculcado su padre, el rey Felipe. Aunque han sido pocas las veces en que la joven ha sido fotografiada en las pistas, sí se sabe que en 2017, por ejemplo, estuvo una semana en Astún con su hermana, Sofía, en un viaje escolar de su colegio, Santa María de los Rosales.
El rey Felipe ha frecuentado mucho las pistas del pirinero oscense, que suele visitar cada año junto a sus amigos. Hace unos meses, acudió a Jaca al funeral del que fuera director de la estación de Candanchú y profesor de esquí de la familia real, Eduardo Roldán, con quien le unía una estrecha amistad.
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