Los contribuyentes españoles tienen aún la oportunidad de ahorrarse un buen dinero en su próxima declaración de la Renta, correspondiente al año 2023, antes de que acabe el presente año. Y es que hasta el próximo 31 de diciembre todavía pueden adoptar algunas decisiones que van a permitir rebajar el pago de impuestos.
Como cada año, el sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) ha realizado una serie de recomendaciones con las que se puede ahorrar adicionalmente hasta 4.277 euros en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Desde Gestha han llamado la atención sobre el hecho de que "las mayores ventajas fiscales se concentran en los contribuyentes con mayores ingresos y patrimonios".
De esta forma, la organización ha señalado que mientras que los ciudadanos con ingresos superiores a los 600.000 euros anuales -el 4,7% de los declarantes- pueden maximizar las ventajas fiscales adicionalmente en 40.378 euros.
Por contra, para las personas con rendimientos anuales inferiores a 21.000 euros el aumento de sus ventajas fiscales puede llegar a los 1.820 euros, aunque en la práctica estas deducciones son "inexistentes" para la mayoría por la ausencia o la baja cuantía de sus retenciones.
Las deducciones más habituales que los contribuyentes con rentas bajas suelen aprovechar -sea autonómica o estatal- están relacionadas con el alquiler de la vivienda habitual, aunque solo es posible si el contrato es anterior a 2015.
Aportaciones a planes de pensiones empresariales
Los planes de pensiones siempre han constituido un importante elemento de ahorro para los ciudadanos, aunque el Gobierno viene desincentivando las aportaciones a planes de previsión individuales, al apostar por los planes de previsión empresariales, lo que se conoce como segundo pilar del sistema.
En este sentido, recuerdan desde Gestha, que la aportación máxima a los planes individuales ha bajado de los 8.000 euros en 2020 hasta los 1.500 en 2022. Para 2023, la aportación máxima al plan de pensiones individual se mantiene en 1.500 euros.
No obstante, en el caso de que tu empresa cuente con un plan de previsión social empresarial (PPSE) este límite se puede incrementar hasta los 8.500 euros cuando dicho aumento provenga de contribuciones empresariales o de aportaciones del trabajador.
Adquirir un vehículo eléctrico
Los conductores que adquieran un vehículo eléctrico hasta el próximo 31 de diciembre 2024 tienen derecho a una deducción del 15% del valor de compra. También se podrá acceder a esta ventaja fiscal si se realiza una entrega a cuenta mínima del 25% del coste final de vehículo. En este último escenario, el pago restante se debe realizar antes del final del segundo año posterior al del pago a cuenta.
En ambos casos, la base máxima deducible es de 20.000 euros e incluye el valor de adquisición del vehículo, incluidos gastos e impuestos, y descontará las cuantías que hayan sido subvencionadas a través de un programa de ayudas públicas, como, el plan Moves III.
Por otra parte, para quien desee instalar un punto de recarga para vehículos eléctricos en un inmueble de su propiedad hay prevista una desgravación del 15% del coste de la instalación. No se permite que esta desgravación afecte a una actividad económica y no puede pagarse en metálico. La deducción, que acaba en diciembre de 2024, se practica en el año en que finaliza la instalación y la base máxima es de 4.000 euros, descontadas las ayudas públicas.
Deducción por maternidad
Los funcionarios de Hacienda también han recordado que hasta 2022 sólo las madres trabajadoras se podían beneficiar de la deducción de 1.200 euros anuales por cada hijo menor de tres años.
Ahora, incluso si en el momento del nacimiento no estaba la madre trabajando sino cobrando el desempleo, o también si con posterioridad cotizó 30 días o más, podrá beneficiarse de esta deducción y solicitar el abono anticipado de 100 euros al mes.
Esta ampliación entre 2020 y 2023 de las madres beneficiadas alcanza igualmente a los 1.000 euros adicionales por gastos de custodia del hijo menor de tres años en guarderías o centros de educación infantil autorizados.
Hasta 60.100 euros si se ha tributado en el extranjero
Por otra parte, haber trabajado para compañías que se encuentran fuera de España cuenta con ventajas fiscales. Así, los ingresos obtenidos por nuestro trabajo están exentos de tributación con un límite máximo de 60.100 euros anuales.
Eso sí, Gestha aclara que se podrá aplicar esta deducción "siempre y cuando en el territorio en el que se realicen los trabajos se aplique un impuesto de naturaleza idéntica o análoga a la del IRPF y no se trate de un país o territorio calificado reglamentariamente como paraíso fiscal".
Donativos a ONGs
Los donativos, donaciones y aportaciones a organizaciones no gubernamentales (ONGs), cuyo objetivo fundamental es contribuir al desarrollo social, permiten al contribuyente "deducir el 80% para los primeros 150 euros y el 35% para los importes restantes, que llega al 40% si en los dos años inmediatos anteriores se dona a favor de una misma entidad por importe igual o superior, en cada uno de ellos, al del ejercicio anterior, limitada a una aportación máxima del 10% de la base liquidable".
De esta forma, destaca Gestha, los donativos "tienen el mayor atractivo fiscal en relación a la aportación efectuada para estos fines solidarios, pudiendo aumentar el beneficio fiscal en unos 843 euros adicionales".
Cuotas de afiliación a partidos, sindicatos y colegios
Por último, el sindicato ha destacado que las cuotas de afiliación y aportaciones a partidos políticos pueden reportar al contribuyente algún beneficio adicional, ya que suponen una deducción del 20%, limitada a una base máxima de 600.
En paralelo, las cuotas sindicales y de colegios profesionales deducen de los rendimientos del trabajo -si bien las últimas con un límite de 500 euros-, así como los gastos de defensa jurídica de litigios en la relación laboral con el límite de 300 euros anuales.
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