Los peligros del óxido nitroso: el gas de la risa del joker puede ser letal en los cómics.. y en la vida real

Los peligros del óxido nitroso: el gas de la risa del joker puede ser letal en los cómics.. y en la vida real
Los peligros del óxido nitroso: el gas de la risa del joker puede ser letal en los cómics.. y en la vida real
Los peligros del óxido nitroso: el gas de la risa del joker puede ser letal en los cómics.. y en la vida real
Los peligros del óxido nitroso: el gas de la risa del joker puede ser letal en los cómics.. y en la vida real
GARUNA EFFECT

Villanos icónicos del mundo del cómic hay muchos, pero el más reconocido sin lugar a dudas es el Joker. Un asesino en serie y un supervillano que destaca especialmente por ser impredecible y estar totalmente loco. Su apariencia es de lo más significativa, pareciéndose al Joker de las barajas de cartas, ya que se viste al estilo bufón o de payaso, y comete crímenes violentos, a veces personalmente con sus propias manos y otras de sus propios secuaces.

A menudo se le reconoce como el mayor enemigo de Batman y, de entre todos los villanos que tiene el caballero oscuro, éste es uno de los mayores quebraderos de cabeza para él. Por eso, debido a su política de “cero kills”, el Joker se pasa más tiempo en el Asilo Arkham, un psiquiátrico de Gotham City, que en la propia ciudad. Aún así, eso no le impide realizar actos maquiavélicos tanto dentro o fuera de las instalaciones. Además de ser un mortífero e impredecible luchador físico, es un brillante y despiadado cerebro criminal. ¿Por qué comete tales atrocidades? No se sabe. Su única motivación es su sádico deseo de mostrar a la gente el sinsentido de la vida a través del dolor y la muerte, y el narcisismo de ver el mundo rehecho a su propia imagen. Adapta constantemente su personalidad y su psicosis para responder al mundo que le rodea, a veces como un inofensivo embaucador y otras como un brutal asesino de masas.

Los jugadores de Nintendo Switch estamos de suerte, ya que la trilogía de Batman Arkham se va a adaptar a esta consola para que los fans podamos combatir el crimen por las calles de Gotham y, por supuesto, evitar que el Joker la destruya. Batman es su único oponente digno reconocido por el propio villano, y aunque este villano impredecible ha dejado pasar múltiples oportunidades de asesinar al caballero de la noche, no tiene problemas en matar a Robin sin reparo alguno o incapacitar a Batgirl a sangre fría, como hemos podido ver una y otra vez en las múltiples reediciones del cómic La Broma Asesina. Su presencia en la ciudad infunde de todo menos tranquilidad.

No hay constancia de un nombre real del Joker, aunque en distintos momentos de la historia del personaje se le ha llamado Jack Napier, el Joker de Jack Nicholson, Jeremiah Valeska, de la serie Gotham interpretado por Dominic Monaghan, Arthur Fleck, de la reciente película Joker de Joaquin Phoenix, y Jack Oswald White, de los propios comics de DC, pero ninguno se ha aplicado de forma consistente a todas las versiones del personaje. Aunque todos tengan nombres diferentes o directamente sólo se refieran a ellos como “El Joker”, las características siguen siendo las mismas. Locura, impredecibilidad, caos y… Un arma característica.

El gas de la risa del Joker, o “Joker Venom” ha existido desde los primeros años de la historia del villano de Batman. Aunque sus efectos y medios de dispersión han variado a lo largo de las décadas, su función principal sigue siendo la misma: una vez que entra en el torrente sanguíneo de la víctima, la toxina provoca estallidos instantáneos e incontrolables de risa, seguidos poco después por la muerte y una gran sonrisa parecida a la del propio Joker, que se extiende por el rostro de la víctima desfigurándola y dejándola con una tez que aterra. Es un arma cruel pero muy apropiada para el Joker, no sólo por la naturaleza de la misma, si no por cómo la utiliza entre sus enemigos… Y sus aliados.

El gas de la risa en el cómic

Un ejemplo que tenemos resumido en esta página de Screen Rant sobre cómo el Joker prueba su “Joker Venom” con la gente es… aterrador. En el cómic Batman/Catwoman nº 5 se retoma el enfrentamiento entre Selina Kyle (Catwoman) y Andrea Beaumont (El Fantasma) del número anterior. Andrea, antigua amante de Bruce, ha regresado a Gotham para vengarse del Joker por matar a su hijo. Es plenamente consciente de que sería una tontería intentar convencer a Batman de que le entregue al Joker, pero sabe que Selina no comparte los mismos principios morales inquebrantables que el murciélago (ya sabéis, lo de no matar a nadie y esas cosas). Así que Andrea se propone persuadir a Catwoman de que debería permitirle matar al Joker, revelándose el método secreto del villano para perfeccionar su fórmula del gas de la risa.

Secuaz del Joker encadenado.
Secuaz del Joker encadenado.
Screenrant y DC comics

Andrea le presenta a un fanático del Joker convertido en leal secuaz al que capturó y encadenó. Mientras éste está inmóvil y suplicando por su vida, Andrea explica que a su prisionero se le encargó reunir a otros devotos del Joker y engañarlos para que le siguieran hasta su escondite y así utilizarlos como sujetos de prueba vivos con el fin de perfeccionar el gas. A lo largo de todos los años en los que el Joker ha aplicado su toxina mortal entre civiles inocentes, había grupos enteros de personas manipuladas para ser meros conejillos de indias de la horrible arma. No sólo es que el mayor villano de Batman sea una pesadilla para los ciudadanos, es que además su locura por el mal la sufren también sus más fervientes seguidores.

El “Joker Venom” es un arma a temer sin ninguna duda, pero infunde más terror la capacidad de un villano con una locura extrema de manipular a su antojo a tantas personas. Sin coacción alguna, logra que sus secuaces se inoculen un compuesto que saben de primera mano el dolor y la muerte que les va a provocar. Por suerte (bueno, suerte no es la palabra), en la vida real tenemos un gas de la risa no tan letal como el del villano del caballero oscuro, pero con el que tenemos que tener cuidado y no abusar, por muy bien que nos lo pasemos.

Los peligros del óxido nitroso

El óxido nitroso, comúnmente conocido como gas de la risa, tiene importantes usos médicos, especialmente en cirugía y odontología, por sus efectos anestésicos y analgésicos. Tiene amplios usos, como el de oxidante en un motor de cohete ya que es mucho menos tóxico y, debido a su estabilidad a temperatura ambiente, también es más fácil de almacenar y relativamente seguro de transportar en un vuelo. También puede usarse en las carreras de coches, como hemos podido ver en la saga Fast & Furious, donde el óxido nitroso (a menudo llamado "nitro") permite al motor quemar más combustible al proporcionar más oxígeno durante la combustión. El aumento de oxígeno permite aumentar la inyección de combustible, produciendo una mayor potencia. Como dato curioso, el gas está autorizado para su uso como aditivo alimentario (E942) como propelente de aerosol , usándose en botes de nata montada en aerosol y otros botes a presión de cocina.

El nombre coloquial, "gas de la risa", fue acuñado debido a los efectos eufóricos que se producen al inhalarlo, propiedad que ha llevado a su uso recreativo como anestésico disociativo. El problema surge cuando se usa de forma indebida y de forma recreativa.

Según este informe del Departamento de Sanidad, El óxido nitroso lleva asociados riesgos como el de asfixia, debido a su naturaleza de gas licuado comprimido. Al funcionar como anestésico disociativo, también puede provocar alucinaciones, vocalización incontrolada, alteraciones de la percepción, desorientación espacial y temporal o reducción de la sensibilidad al dolor.

Puede llevar a graves problemas de salud, especialmente por el hecho de conllevar falta de oxígeno al cerebro, lo que puede implicar desde desmayos hasta paradas respiratorias, dándose casos en los que su consumo reiterado puede dañar la médula espinal y llegar a provocar la muerte. Si se utiliza esta sustancia durante varios días seguidos o de manera intensa en una sesión se produce una disminución de los niveles de la vitamina B12 en el organismo; y un déficit de esta vitamina tendría como consecuencia la aparición de problemas neurológicos y cognitivos.

El consumo de este gas también tiene otro tipo de consecuencias, como convulsiones, arritmias, parada respiratoria o cardíaca especialmente en personas con epilepsia o antecedentes cardiovasculares, o quemaduras en la boca y la parte superior del tracto respiratorio debido a la inhalación directamente de los cartuchos, ya que el gas sale a una temperatura muy baja. En grandes cantidades puede llevar a la muerte por asfixia.

Nadie en su sano juicio usaría el “Joker Venom” para divertirse o usarlo como estupefaciente, pero la vida real siempre asombra y podemos confirmar que el óxido nitroso puede ser una especie de gas de la risa del Joker (en una medida ínfima, lógicamente).

La humanidad sigue su peculiar camino de diversión y riesgo. El uso indebido de este compuesto hace que, aunque parezca un gas poco peligroso a priori, sea letal. Menos mal que el Joker no existe entre nosotros. Porque visto lo visto no pasaría como en los cómics, donde sus secuaces buscarían a gente para probar el gas de la risa. No haría falta. Tendríamos miles de personas que le harían el trabajo sin querer.

REFERENCIAS:

Mostrar comentarios

Códigos Descuento