La red de Cercanías Madrid está "sufriendo fuertes demoras" debido al cierre de la estación de Collado Villalba, que da servicio a las líneas C-8, C-3a y C-10, según advierte Cercanías en la red social X (antes Twitter) por amenaza de bomba. Horas más tarde de que se lanzase la alerta, los agentes de la Guardia Civil comprobaron que no existía ninguna amenaza. No obstante, la empresa pública aseguraba, cuando ha llegado la alarma, que los trenes "no pueden efectuar su paso" por esta estación "por orden de los servicios de seguridad". Así ha permanecido hasta la mitad de la tarde, cuando los convoyes han vuelto a circular por las vías.
Eran las 15.20 horas cuando una llamada llegaba a las dependencias de la Guardia Civil. En ella, un trabajador de Renfe alertaba de la presencia de una mochila de gran tamaño sin dueño y que podía contener una bomba en su interior, según informan fuentes de la Guardia Civil. Ante esta situación, los agentes han procedido a cortar la circulación de los trenes y a desalojar la propia estación.
El equipo de desactivación de explosivos, los Tedax, a su llegada desde Valdemoro, han corroborado que la mochila no contenía ningún artefacto explosivo. Posteriormente, sobre las 17.30 horas, los trenes han vuelto a circular con normalidad y, poco a poco, han ido recuperando la velocidad de tránsito.
Adif ha sido quien ha informado a través de sus redes sociales de que la estación dejaba de prestar servicio y que la circulación se iba a interrumpir durante un tiempo. Es decir, ni paran ni pasan por esta parada. "Por orden de los servicios de seguridad los trenes no pueden efectuar su paso por la estación de Villalba, provocando fuertes demoras", han publicado.
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