Las estufas de gas podrían alargar su esperanza de vida en las terrazas de la ciudad de Madrid. Al menos, hasta que la temporada de invierno llegue a su fin, el próximo 15 de marzo. Haciéndose eco de la petición de Hostelería Madrid que avanzó 20minutos, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, se ha abierto este lunes a retrasar unos meses su prohibición. De no introducirse ningún cambio en la Ordenanza de Terrazas de Hostelería y Restauración, aprobada en enero de 2022, estos calefactores de propano estarán prohibidos a partir del 1 enero.
El anterior Gobierno de coalición entre PP y Cs ordenó durante el pasado mandato que desaparecieran a partir de 2024 las estufas de gas, así como "aquellas que emitan gases de efecto invernadero a la atmósfera". Para allanar el paso de los restauradores hacia fuentes de energía más limpia, concedió al sector una moratoria de un año. A dos meses de que decaiga este periodo de gracia, muchos locales todavía conservan los aparatos contaminantes y por un retraso en las ayudas, por falta de presupuesto o responsabilidad, no ven plausible sustituirlos por estufas eléctricas.
![fotografo: Jorge Paris Hernandez [[[PREVISIONES 20M]]] tema: Calor. Ola de calor. Madrid](https://imagenes.20minutos.es/files/image_320_180/uploads/imagenes/2023/07/10/fotografo-jorge-paris-hernandez-previsiones-20m-tema-calor-ola-de-calor-madrid-8.jpeg)
"Si hay una situación en la que se produce un desabastecimiento de las estufas eléctricas o no se pueden sustituir por razones justificadas, podríamos estudiar qué medidas se pueden adoptar desde el Ayuntamiento", ha señalado el primer edil al ser inquirido por este medio sobre la solicitud que la patronal de los hosteleros madrileños envió en forma de carta hace algunas semanas a la Vicealcaldía de la ciudad y que todavía no había obtenido respuesta.
La prórroga de unos meses que piden los hosteleros requeriría una reforma de la actual ordenanza, según comentan fuentes municipales a este periódico, tarea "que no es sencilla" de acometer en "tan poco tiempo". Almeida, en cualquier caso, ha considerado que "todo es susceptible de estudio" para "paliar esa situación y también garantizar que las terrazas puedan tener una actividad normal".
Según explicó a este medio el presidente de la asociación Hostelería Madrid, Antonio Aparicio, "el 1 de enero, en pleno auge del consumo, muchos hosteleros no podrán calefactar, lo que podría generar muchas pérdidas, económicas y de empleo".
En paralelo al veto de las estufas de gas, el Ayuntamiento de Madrid lanzó el año pasado una línea de subvenciones, con una partida de dos millones de euros, para facilitar la compra de radiadores eléctricos. "Solo una estufa eléctrica te puede costar 300 euros. Y a eso hay que añadir la toma de corriente y el coste de la obra, puesto que los cables tienen que ir soterrados... En total, hemos calculado que cuestan entre 2.000 y 4.000 euros", cuenta Aparicio.
No obstante, de acuerdo con el representante de los hosteleros en la capital, las ayudas "están casi desérticas" porque desde la administración no se conceden con la misma celeridad los permisos de obra para instalar los aparatos, un requisito indispensable para recibir la asignación económica. Desde el área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad confirman que todavía queda crédito disponible, toda vez que se inyectaron otros 100.000 euros adicionales el pasado marzo.
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