El productor y director de cine porno Ignacio Allende, más conocido como Torbe, ha aceptado este lunes una condena de dos años de cárcel tras reconocer en el juicio los delitos de distribución y posesión de pornografía infantil por los que está siendo juzgado.

Al inicio del juicio, la Fiscalía ha modificado sus conclusiones iniciales y ha rebajado de 7 años y 7 meses  a dos años de prisión la pena que solicitaba para el productor de cine, con la atenuante de reconocimiento de los hechos y de reparación del daño porque Torbe ha pagado ya 65.000 euros por daños morales.

Lo ha hecho tras una conformidad con el acusado que requería que este reconociera los hechos contestando brevemente "sí" en su comparecencia por videoconferencia al ser preguntado por la magistrada.

El acuerdo incluye que sea condenado a dos años de cárcel, a dos de libertad vigilada después, la prohibición de ver ni ponerse en contacto durante 4 años con la testigo protegida que denunció el caso en 2015, la prohibición de trabajar con menores durante seis años, y que se decomise el disco duro y el móvil desde que se distribuyeron las imágenes de la menor.

La defensa de Torbe ha pedido que la pena de cárcel no se haga efectiva, lo que no se ha dirimido en la vista.

La acusación popular pidió suspender el juicio

El letrado de la acusación popular, Manuel Merino, ha solicitado al inicio del juicio la suspensión al considerar que los procesados tienen que comparecer personalmente, incluso para prestar su conformidad, y ha advertido de que "si no se suspende estaríamos abocados a una posible nulidad".

Pero la jueza lo ha rechazado, destacando que el juicio debe celebrarse ya por el tiempo que ha pasado desde los hechos, y que "una justicia lenta es injusticia".

Esta causa judicial se ha "desinflado" con respecto a la imputación inicial de abril de 2016, cuando Torbe fue arrestado e ingresó en prisión preventiva por los delitos de pornografía, trata de seres humanos, blanqueo de capitales y delitos contra la Hacienda Pública.

El actor está acusado finalmente de grabar en 2012 vídeos pornográficos con una joven y, al terminar y saber que era menor de edad, guardarlos para publicarlos cuando cumplió 18. Asimismo, en 2015 se le imputa haber grabado imágenes sexuales con una menor de edad (testigo protegida en la causa) que no quería que fuesen difundidas, a pesar de lo cual las envió a varias personas.

Entre estas imágenes está una que se hizo viral, y que Torbe envió a varios jugadores del Athletic de Bilbao, en la que la menor se levantaba la camiseta de este equipo de fútbol y enseñaba el pecho mientras exclamaba "Aúpa Athletic".

Otro de los acusados, Francisco José M. L., también ha llegado a una conformidad con la Fiscalía, mientras que el tercero, José Carlos P.R., no lo ha hecho y el juicio sigue contra él.