Hace 476 mil años los hombres vivían en casas de madera y así lo han demostrado arqueólogos de las universidades de Liverpool y Aberystwyth con el hallazgo de los restos de madera de una antigua morada en el yacimiento arqueológico de Kalambo Falls, en el límite entre Zambia y Tanzania. 

El estudio, publicado en la revista Nature, recalca la excepcionalidad del hallazgo porque es muy raro que las estructuras de madera sobrevivan "desde la Edad de Piedra Temprana, ya que requieren condiciones excepcionales para su conservación". 

En concreto, se recuperaron cinco objetos de madera modificados y un sexto objeto que permanecía inmutable. 

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Entre esos objetos modificados destacaban dos troncos entrelazados y unidos transversalmente por una muesca cortada intencionalmente y que podrían haber sido "parte de una plataforma de madera utilizada como pasarela, para mantener secos los alimentos o la leña o tal vez como base sobre la que se construyó una vivienda", explica Geoff Duller, uno de los descubridores y profesor de la Universidad de Aberystwyth.

Primeros usos de la madera para la construcción

Los restos, aparecidos en el río Kalambo, podrían representar el primer uso de la madera para la construcción y ampliar lo que sabemos sobre las capacidades técnicas de los primeros homínidos para trabajar con los troncos de los árboles. 

Asimismo, este estudio cuestiona la vida nómada de los habitantes de la Edad de Piedra pues la abundancia de agua de las cataratas de Kalambo y el frondoso bosque para proporcionar alimentos habría provocado la existencia de pueblos sedentarios, "como mínimo, dedicaron un gran esfuerzo a este lugar", afirma Duller.