En los últimos días se ha viralizado una teoría de la conspiración que asegura que si un producto muestra el símbolo de una rana significa que contiene toda clase de insectos, lo que supondría una táctica de Bill Gates para envenenar a la población. Pero es un bulo, y los usuarios que difunden estos contenidos no aportan ninguna prueba de que sean reales.

El símbolo que se difunde, y por el que habéis preguntado al chatbot de WhatsApp de Maldita.es (+34 644 229 319), en realidad pertenece a la Rainforest Alliance Certified, una organización internacional sin fines de lucro que trabaja para la protección ambiental de los bosques, y su propósito es indicar que el producto o ingrediente certificado se elaboró de manera sostenible.

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Estos contenidos forman parte de una narrativa desinformadora que se repite: que la Agenda 2030, supuestamente dirigida por el filántropo Bill Gates, en realidad es un plan para controlar a la población. Para ello, relacionan a la marca con el empresario y aseguran que la Rainforest Alliance pertenece al millonario, por lo que los insectos y los productos que llevan este sello son suyos. Pero Bill Gates no forma parte de la junta de Rainforest Alliance, y su fundación otorgó una subvención a la organización entre 2007 y 2011 para impulsar la agricultura sostenible.

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No es el único contenido que asegura que la Agenda 2030 busca controlar a la población o que nos va a obligar a comer insectos. Hemos desmentido otros mensajes que aseguran que en 2030 se va a prohibir comer carne y lácteos o que los aditivos que tienen su origen en insectos (como el E904, que proviene del gusano de la laca o el E120, que viene de la cochinilla) son peligrosos. Pero en ambos casos se trata de un bulo.