Dicen que la cabra tira siempre al monte, en este caso, al desierto; pero el nieto mayor de los reyes eméritos está intentando dejar la dudosa fama que le precede, más ahora que acaba de entrar en el cuarto de siglo, una edad muy oportuna para sentar definitivamente la cabeza.

Felipe (por su tío, el entonces príncipe de Asturias) Juan (por su abuelo don Juan de Borbón) Froilán (por el patrón de Lugo, ciudad cuyo ducado ostenta su madre) de todos los Santos de Marichalar y Borbón, más conocido como Froilán a secas, cumple hoy 25 años intentando quitarse el sambenito de ser la china en el zapato de la Casa Real Española.

Nació en la Ruber Internacional de Madrid el 17 de julio de 1998 y desde ese mismo instante, ya formó parte de una colección de anécdotas y algunos despropósitos menos simpáticos que han forjado su personalidad pública. Su padre, Jaime de Marichalar, hoy separado de la infanta Elena, habló de él durante su presentación pronunciando una frase aún hoy recordada: "Es igual que su madre, el pobre", descripción que tuvo que matizar para aclarar que era una alegría y no un infortunio.

A partir de allí, convertido en el tercero en la sucesión al trono tras su tío Felipe y su madre, el pequeño Pipe, como le llamaban en casa, todo ha sido un escrupuloso seguimiento de sus gestos y evolución. Mítica ya es la foto de la patada que le propinó con ganas a su prima Cristina López-Quesada a la edad de 6 años, cuando ambos eran pajes vestidos de terciopelo dorado en la boda de los príncipes de Asturias. 

EFE

También fue muy llamativo cuando a los 13 años se disparó con una escopeta en el pie estando con su padre en la casa familiar de Soria y tuvo que ser operado de urgencia. 

Los veranos en Palma sembraron de fotos del niño, a menudo peleón y de mano larga con sus primos, los tranquilos Urdangarin, cuando daban clase de vela y se abalanzaba sobre ellos.

Mediocre en los estudios, ha tenido que repetir varios cursos. Un verano de malos resultados fue enviado por sus padres a un internado en Sigüenza (Guadalajara) para recuperar asignaturas, donde conoció a Mar Torres, su primera novia. La niña, heredera de una rica familia industrial, inició una relación con Froilán con no pocas discusiones públicas. Posteriormente, ella se hizo influencer: adelgazó, se tiñó de rubia, se operó y se dedicó a subir fotos en las redes y a acudir a photocalls variados.

Posteriormente, la pareja rompió. Froilán ha estudiado en el extranjero, siempre en centros privados, para tratar de recuperar el ritmo académico, que concluyó en la escuela de negocios The College for International Studies, en Madrid, cursando estudios de Administración y Dirección de Empresas.

EUROPA PRESS

Su predilección por la noche y los lugares de moda le han causado no pocos problemas. El año pasado, Froilán invitó a sus amigos por su 24 cumpleaños a una de las discotecas más conocidas de Marbella. La casualidad quiso que esa misma noche en el local se produjera un altercado que nada tuvo que ver con el sobrino del Rey, aunque él estaba allí. Se produjo un tiroteo y una pelea en la que cinco personas resultaron heridas. Según fuentes policiales, el motivo fue un ajuste de cuentas entre bandas de narcotraficantes. 

En las navidades de 2022 se encontraba en un local donde hubo una riña y un herido por arma blanca, que era amigo de Froilán y a quien acompañó al hospital, aunque el nieto del rey no participó en la trifulca. En febrero de 2023, el desalojo en Madrid de un after a las 9 de la mañana por parte de la policía municipal reveló que en el interior de este local, donde había exceso de aforo, se encontraban menores de edad y había drogas. Froilán también se encontraba allí, otro tropiezo del azar.

Polémica a polémica, Froilán no salía de tanto ruido, incómodo para su entorno y preocupante para sus padres. Así fue como se decidió, tras la mediación de su abuelo el rey emérito, que el joven viajara a Abu Dabi con trabajo y residencia. Desde febrero pasado, el joven trabaja en una empresa estatal de nuevas energías, donde parece que ha encontrado el anonimato que le permitirá convertirse, quizás y definitivamente, en Felipe y dejar atrás a Froilán. Mientras esto pasa, el joven ha recibido a unos cuantos amigos en el país que le acoge actualmente, para festejar con ellos una edad tan importante. 

Allí estará la que es su novia desde hace un tiempo, la influencer Belén Perea, con quien ha estado antes unos días en Ibiza, uno de sus lugares predilectos junto con Marbella.

No se sabe si hasta Abu Dabi han viajado sus primos Urdangarin, con los que olvidadas las peleíllas de cuando eran niños, tiene una relación muy estrecha y cercana. Es habitual verlos juntos, en Madrid y en Palma. No así con sus primas Leonor y Sofía, que rara vez han coincidido, fuera de eventos familiares, con él.

Muy unido a su madre y a su abuelo materno, el díscolo nieto mayor de los reyes eméritos ocupa la cuarta posición tras la princesa de Asturias, la infanta Sofía y su propia madre, en la sucesión al trono español. Ha acompañado a su abuela Sofía al funeral de su hermano Constantino en Grecia. Y en la reciente graduación de su prima Irene Urdangarin viajó a Ginebra con su abuelo materno y fue el único de sus primos que llevaba chaqueta y corbata.

Parece ser que el diciembre formará parte de la organización en Abu Dabi de la cumbre del clima. Una buena manera de entrar en los 25.