El malestar se ha apoderado de los invitados a la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva tras haber recibido un email en el que se indican ciertas normas que han supuesto el descontento de los asistentes al enlace matrimonial del año.
El escrito detalla que los novios piden a los invitados ayuda para garantizar la privacidad de los asistentes. Una de las medidas que más debate ha generado es la prohibición de los teléfonos móviles durante la celebración. Los invitados deberán dejar sus aparatos en una consigna a su llegada y solo podrán usarlos bajo supervisión.
Además, los novios apuntan que se facilitará a los invitados un número de teléfono al que familiares y amigos puedan llamar en caso de emergencia: "Para mantener la privacidad de la boda, los teléfonos móviles serán custodiados en consigna a vuestra llegada. Si cualquier invitado necesita ser contactado no dudéis en facilitar nuestro teléfono de atención para que podáis ser localizados. Además, habrá una zona habilitada para poder hacer uso de vuestros teléfonos móviles en cualquier momento".
Por su parte, Jesús Reyes, estilista y colaborador habitual de Espejo Público ha destacado que conoce a algunos de los invitados a la boda y ha asegurado que el contenido del mensaje no ha sentado nada bien pues los amigos y el círculo cercano de los novios considera excesiva la medida, así como las inspecciones de vehículos o el control absoluto del personal de servicio.
Asimismo, cabe destacar que la prohibición del uso de móviles se ha convertido en una práctica habitual en las bodas de los famosos, pues se trata de preservar la exclusiva vendida a ciertos medios de comunicación. Pese a esto, Reyes ha apuntado que "los invitados se definen como cívicos y se van a comportar".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios