Una pizzería de la ciudad ucraniana de Kramatorsk, en la provincia de Donetsk, fue atacada por los rusos durante la tarde noche del martes. Este bombardeo con misiles ha dejado, casi una decena de muertos y más de 50 heridos civiles. Entre los fallecidos hay tres menores, según ha informado el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania (DNSS).

"A las 23.00 (hora local, 20.00 GMT), cuatro personas, incluida una joven de 17 años, murieron cuando un proyectil impactó en un restaurante", dijo la Fiscalía ucraniana en una primera instancia. En el ataque han quedado parcialmente destruidos "edificios de apartamentos, locales comerciales, automóviles, una oficina de correos y otros edificios". 

Tras el suceso, se han difundido imágenes y vídeos a través de medios de comunicación y redes sociales, en las que se pueden ver cómo los propios ciudadanos asisten a aquellos que tienen heridas de mayor gravedad y les ayudan a llegar a las ambulancias para que sean atendidos por los sanitarios.

Entre los más de 50 heridos se ha registrado un bebé de ocho meses. Ha sido a través de un canal de Telegram por donde se ha compartido una imagen del pequeño en brazos de la que parece ser su madre y con la cabeza y ropa completamente ensangrentadas.

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También se han publicado imágenes de cómo ha quedado tanto el interior del local como su fachada exterior y los alrededores de esta pizzería, en la que las autoridades siguen buscando más víctimas entre los escombros, pues no se descarta que pueda haber más.

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Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha pedido llevar ante un tribunal a los "asesinos y terroristas rusos" por este bombardeo. "Cada una de esas manifestaciones de terror demuestran una y otra vez al mundo entero que Rusia merece una sola cosa como resultado de todo lo que ha hecho: la derrota y un tribunal, juicios justos y legales contra todos los asesinos y terroristas rusos", ha alegado en su comunicado.