El Consell del Botànic, actualmente en funciones hasta que tome posesión el surgido de las elecciones del 28-M, ha aprobado en apenas una semana dos declaraciones institucionales: la primera, hace siete días, contra la violencia machista, que el PP ha llevado a la Junta Electoral al considerarla "partidista y sectaria", y la segunda, este jueves, en favor del colectivo LGTBI en vísperas del Orgullo. Ambas se han producido tras conocerse el pacto autonómico entre PP y Vox y las declaraciones de dirigentes de este último partido negando la violencia de género. 

En opinión de los populares, el Ejecutivo de Puig debe "dejar de utilizar el Consell y sus ruedas de prensa para contaminar la campaña electoral del 23-J". El todavía president ha replicado que "nunca" dejará pasar "ningún atropello a las mujeres" y ha pedido al PP que "rectifique" su pacto.

En concreto, el PP ha trasladado una reclamación ante la Junta Electoral Provincial de Valencia por la aprobación, en el pleno del Consell del pasado viernes, de una declaración institucional sobre la violencia de género que, a juicio de los populares, "sirvió para atacar" a esta formación y a Vox en un contexto electoral, el de los comicios generales del próximo 23 de julio, a raíz de la firma de su acuerdo de gobierno. En el escrito, el PP solicita que se incoe un expediente sancionador contra la vicepresidenta y portavoz del Consell, Aitana Mas, que fue la encargada de ofrecer la rueda de prensa posterior al pleno. De hecho, sostiene que Mas "utilizó el foro y su posición institucional paras verter mensajes de marcado carácter electoralista con ataques directos al PP, vulnerando la prohibición contenida en la LOREG".

La propia vicepresidenta ha replicado este jueves, tras el pleno del Consell, que el Gobierno valenciano en funciones no se "amedrentará": "Seguiremos defendiendo los derechos de todas las personas», ha manifestado. Es más, ha dado cuenta de una segunda declaración del Ejecutivo autonómico, en este caso de respaldo al colectivo LGTBI, con la que ha mostrado "su convencimiento de que la voluntad mayoritaria de la sociedad valenciana es no solo mantener el grado de respeto a los derechos humanos y en concreto de los derechos de las personas LGTBI conseguidos estos años, sino también consolidarlos y avanzar en los temas pendientes". Mas ha dicho, como se recoge en la declaración institucional, que la Comunitat Valenciana "tiene que seguir siendo una tierra de derechos, respeto e igualdad".

El clima político valenciano ha vuelto a enrarecerse apenas dos días después del encuentro entre el presidente saliente, el socialista Ximo Puig, y el ganador de las elecciones, el popular Carlos Mazón, con el que quisieron lanzar un mensaje de normalidad institucional, sobre todo de cara a las inversiones pendientes de llegar a la Comunitat Valenciana.

De hecho, Puig ha replicado al PPCV que "nunca" va a dejar pasar "ningún atropello a las mujeres" y que el Consell, con su declaración de la semana pasada, "lo único que hizo es volver a reafirmar el pacto contra la violencia de género", al tiempo que ha apelado al "sentido común" del PP y le ha pedido "rectificar" su pacto con Vox. "No se puede estar en la división de aquello que está acordado", ha añadido al ser preguntado por esta cuestión, y ha lamentado que los populares se hayan hecho una "enmienda a la totalidad a sí mismos con respecto a lo que han hecho estos años, que es situarse en el camino de la decencia". "Nadie puede ser equidistante con la violencia de género", ha manifestado.

"Ya fueron apercibidos"

El director de campaña del PPCV, Miguel Barrachina, ha afirmado que el PSPV y Compromís "deben cesar ya en su actitud sectaria y partidista porque es ilegal utilizar el Consell y sus ruedas de prensa para su campaña electoral". "Ya fueron apercibidos constantemente por la Junta Electoral durante la campaña autonómica, y ahora que están en funciones, siguen utilizándolo sin ningún recato para su propia propaganda partidista y regando con subvenciones públicas de cientos de miles de euros a entidades afines catalanistas", ha criticado.

Para Barrachina, "deben dejar de utilizar el dinero de los valencianos, el espacio de los valencianos de un gobierno en sus últimos estertores, para hacer propaganda política. Es inmoral que un gobierno en funciones, que está de salida, se dedique a tratar de influir en campaña electoral con decisiones partidistas que están fuera de lugar", ha concluido.

Banderas arcoíris en Náquera

Varias banderas arcoíris han aparecido en balcones de Náquera (Valencia), el primer municipio de la Comunitat Valenciana en el que Vox ha conseguido una alcaldía gracias a un acuerdo de gobierno con el PP, que establece que no se colocarán banderas LGTBI en balcones y fachadas de instalaciones municipales. Desde el pasado sábado, el alcalde de este municipio de 7.700 habitantes es Iván Expósito (Vox), ganador de las elecciones.