El profesor despedido de la Facultad de Comunicación y Relaciones Internacionales de Blanquerna por presunto acoso sexual, X. S., ha iniciado un procedimiento judicial contra el centro universitario, entre otras personas físicas y jurídicas, por despido disciplinario.

El profesor se incorporó a Blanquerna a mediados de los noventa, asegura que la decisión de apartarle de la universidad vulnera la presunción de inocencia. 

El profesor acusa al centro de no otorgarle “ninguna opción de defensa” y asegura que durante la investigación interna “sólo le citaron una única ocasión, con pocas horas de antelación” donde, le exigieron “responder de inmediato una lista de preguntas sin conocer el contenido de las denuncias”.

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Asimismo, señala que no le comunicaron el contenido de las denuncias –a pesar de que lo pidió por escrito- y, que en el burofax notificando el despido “no aparece ningún motivo ni falta cometida que haga referencia alguna a un presunto acoso sexual”.

Tres meses de baja

En cuanto a las medidas que la universidad anunció que había tomado previamente contra el profesor –apartarle de la docencia durante tres meses por una queja-, lo niega. 

El profesor explica que, en septiembre de 2022, por mutuo acuerdo entre él y el decano de la facultad, se acogió a “una baja laboral por motivos personales y emocionales vinculados, entre otras circunstancias, al trauma de haber sufrido una serie de acusaciones”. Asegura que este período de baja estuvo regulado y aceptado desde Blanquerna y que una vez más, de mutuo acuerdo, se reincorporó a la docencia durante el mes de enero.

Por ello, anuncia que están estudiando todas las vías posibles para impugnar la decisión tomada, a su parecer de “forma ilegal por la entidad” y denuncia estar sufriendo las consecuencias en su vida personal y profesional de las filtraciones de información a los medios de comunicación.

Burofax de la universidad

En el burofax de despido, la institución da ocho razones para destituir al profesor. Entre ellas, se pueden leer los siguientes motivos: "Preguntar insistentemente al alumnado con quien se relaciona y cuestionar las relaciones del alumnado con comentarios y consideraciones ofensivas y discriminatorias", "dirigirse al alumnado con términos como: preciosa, baby...", "pedir a los alumnos que escriban sus números personales de móvil, el de los perfiles de redes sociales pidiendo que acepten su solicitud de conexión de perfil, así como la dirección de los domicilios particulares" o, "proponer al alumnado hacer una grabación de la habitación del alumno, incluyendo la grabación del interior de los cajones de la habitación, explicándoles que el objetivo académico del ejercicio es conocerles mejor".