Trevor Mullinax es un hombre procedente de Carolina del Sur que el 7 de mayo de 2021 recibió casi 50 disparos por parte de la policía local cuando sus amigos alertaron al 911 para que acudiesen a su casa a realizarle un "chequeo", ya que el joven tenía supuestamente crisis de salud mental que le provocaban intenciones suicidas.
El joven se encontraba con su madre, Tammy Beason, en el interior de su coche cuando los agentes "sacaron sus armas de inmediato y usaron fuerza letal sin tratar de calmar la situación", tal y como recoge la CNN en declaraciones ofrecidas por las víctimas.
Tras lo sucedido, ni él ni su familiar denunciaron el caso. Ha sido dos años después cuando Mullinax ha interpuesto la demanda correspondiente a los agentes del alguacil del condado de York.
La demanda de Mullinax
"Fueron sumamente negligentes, deliberados, desenfrenados, descuidados e imprudentes en el uso de la fuerza letal hacia el demandante Mullinax y el demandante Beason, lo mismo que causó daños físicos, mentales, físicos, mentales, irreparables, permanentes y emocionales a los demandantes", reza la solicitud presentada a la que ha tenido acceso el medio citado.
El cuerpo policial acusa a Mullinax de "señalar y presentar un arma contra ellos", algo que los abogados de este justifican que si bien "él estaba en posesión legal de una escopeta de caza dentro del camión, en ningún momento antes, durante o después de que los agentes del alguacil comenzaran a disparar, el demandante se levantó, señaló o se movió de otra manera con una arma de tal manera que autorizaría a los agentes del alguacil a usar fuerza letal".
La llamada al 911
Los amigos del demandante también han alegado a su favor, puesto que solo estaban "tratando de ayudar a un amigo" cuando contactaron con emergencias.
La persona que llamó al 911 le explicó al teleoperador que la madre había salido con él y que el joven "se había encerrado en su camioneta con un cuchillo", algo provocado por la crisis de salud mental.
Según el testimonio de los amigos, estos proporcionaron los números de teléfono de Mullinax y su madre para que la policía pudiera contactarlos. Pero la denuncia alega que el teleoperador del emergencias no se los proporcionó a los agentes.
"Un ciudadano que necesitaba ayuda"
El suceso fue grabado por las cámaras -a las cuales ha tenido acceso la CNN-. En ellas, se puede ver cómo el abuelo de Mullinax dirige a los agentes a donde pensó que podría haber aparcado su nieto el vehículo.
A medida que se acercan al vehículo, se puede escuchar a un oficial diciendo en voz alta que había "alguien parado justo al lado", viéndose así a Mullinax y su madre en el interior. Después se muestra a los agentes llegando y gritando "manos arriba", antes de abrir fuego contra el camión: todo en menos de 10 segundos.
Los abogados de la familia dicen que los oficiales dispararon casi 50 veces. De estos disparos, fueron nueve los que impactaron en su cuerpo, tres de ellos en la cabeza. "Casi 50 disparos contra alguien que necesitaba ayuda. Un ciudadano que necesitaba ayuda", dijo Justin Bamberg, su defensor.
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