La Policía Nacional ha inmovilizado unos 600 kilos de productos de alimentación, principalmente pescado y carne congelados, caducados e insalubres, que estaban a la venta en varios establecimientos de Madrid y ha detenido a una persona como presunto responsable de un delito contra la salud pública. 

Se ha clausurado un establecimiento y se ha suspendido de forma temporal la actividad de otro por las graves deficiencias sanitarias, tanto en el tratamiento como en el almacenamiento de la mercancía y el elevado riesgo para la salud que conllevaría el consumo de los productos, ha informado la policía. 

Estos establecimientos, situados en las calles Mesón de Paredes y Tribulete, estaban regentados por personas de origen árabe, según fuentes policiales.

Además, se han retirado de la venta productos de cuatro refrigeradores -cárnicos y pescados- y de dos cuartos habilitados como cámaras de conservación de alimentos, ha informado la policía. Se trata de alimentos importados caducados que no cumplían con los requisitos de salubridad mínimos en cuanto a conservación, almacenamiento y venta.

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La investigación se inició tras recibirse una información a través de llamada telefónica, indicando la localización de varios establecimientos en Madrid que, al parecer, estaban importando y vendiendo estos productos, poniendo con ello en riesgo la salud de las personas que los pudieran consumir.  

Tras las pesquisas se identificó un total de cuatro comercios donde se vendían los referidos productos y se comprobó la gran cantidad de personas que los estaban comprando, poniendo en riesgo su propia salud.  

Se contactó con Policía Municipal y con el Servicio de Salud de Distrito Centro del Ayuntamiento de Madrid para coordinar las actuaciones. Posteriormente, se localizaron otros dos locales donde también se sospechaba de la venta de dichos productos.

En el desarrollo de la operación se produjo conjuntamente la inspección de seis establecimientos, localizando e inmovilizando gran cantidad de productos caducados -cárnicos, pescado y de otra índole- que estaban preparados para su venta.  

También se han levantado varias actas administrativas con la colaboración de la Policía Municipal de Madrid.