¿Qué vamos a ver en Ana?Es un programa que intenta aportar información periodística y certezas sobre la exclusiva de ¡Hola!, que es la más importante del año. Se ha hablado muchísimo de todo lo relacionado con Ana, con la gestación subrogada, las entrevistas posteriores... y se han dicho muchas cosas que no son ciertas y queremos en este hueco aportar información y contar como ha sido todo y hablar con los protagonistas y contar una historia que hasta ahora no ha sido oída y con imágenes inéditas.

¿Había seguido mucho este tema antes de que le propusieran el programa?Antes de que me propusieran el programa lo había seguido un poco de lejos, como información general. Ahora me sorprende sobre todo cómo los paparazzis y los periodistas de GTRES son capaces de seguir una pequeñísima pista de hace cuatro meses y son capaces de llegar hasta el final hasta conseguir su objetivo y la forma en la que trabajan, la forma tan profesional en la que trabajan. Esa una de las líneas que vamos a seguir en el programa.

¿Y en las imágenes, qué se puede ver?Hay imágenes bonitas, porque ver a Ana Obregón en esa situación después de haberla visto absolutamente infeliz durante todos estos años, desde la muerte de su hijo, pues es emocionante, independientemente de lo que pienses que la gestación subrogada. Nosotros no estamos aquí para juzgar, nosotros estamos solo para aportar información. Lo cierto es que hay un bebé que está ya aquí y que dentro de unos años verá este programa y todo lo que se ha dicho en televisión y creemos que también hay que proteger a los menores en ese sentido. Vamos a hacer un programa en el que aportamos información y certeza y no emitimos juicios.

Ahora en Miami hay más paparazzis por metro cuadrado que en casi cualquier lugar del mundo…Correcto. Das una patada y aparecen un par de Paparazzis, aunque los buenos, buenos de verdad, se les ve menos.

Es un tema muy controvertido, ¿cómo se hace para no posicionarse? ¿Eso lo harán los colaboradores que estén en plató?Es uno de los temas más controvertidos que hay ahora mismo encima de la mesa para la opinión pública porque tiene de todo. Tiene un debate bioético, tiene un debate político, tiene un debate legal... nosotros, eso se lo dejamos a quienes saben hablar de eso, a quienes tienen conocimientos legales, médicos, bioéticos... y nosotros de lo que nos ocupamos es de aportar información. Habrá en el plató gente que esté a favor y gente que está en contra, por supuesto, todo desde el punto de vista de la información y con el mayor de los respetos. En este especial queremos por encima de todo que cualquiera puede opinar, pero que todo se haga con respeto, que todo se haga de una forma elegante. Tú puedes decir cualquier cosa, y emitir la misma opinión de una forma insultante o de una forma respetuosa, conteniendo seguramente, de fondo la misma tesis. Queremos un programa respetuoso.

¿Cuánto sabe Ana Obregón de este programa?Ana Obregón no ha participado de nada, por supuesto, porque de la exclusiva ni se enteró, es una de las cosas que demostramos en el programa. Hemos contactado con ella después, claro, porque hay que hay que consultar y contrastar y hay que hablar con todas las fuentes y con todas las partes, así que ella sabe que lo vamos a hacer.

¿Usted tiene una opinión personal sobre este asunto?Sí, tengo una opinión personal sobre el asunto, pero como soy presentador no puedo opinar.

¿Le frustra en alguna ocasión no poder hacerlo?No, últimamente los periodistas están muy acostumbrados a opinar y un periodista lo que tiene que hacer es informar, tener información. A mí esa esa es la parte del periodismo que me gusta. Siempre he intentado no opinar y que lo que contaste fuera de la forma más objetiva posible, así que no me frustra no opinar porque no soy quien para juzgar. Para juzgar ya están los jueces y para linchar y lapidar ya está la inquisición. Mi papel es informar y hacer que los colaboradores y la información brillen.

¿Ana Obregón es un personaje de los que ya no quedan?Ana Obregón es un personaje de los que se ven poco en televisión porque tiene un bagaje que se ve poco y una historia profesional y personal que hemos puesto el foco en Telecinco.

¿Este especial podría convertirse en un nuevo Salsa Rosa? ¿Tiene espíritu de continuidad?Pues no lo sé. En principio no nacemos con una vocación de continuidad, sino con la de dar con algo que es especial y que podemos aportar.

Este tema podría dar para años…En España y en todo el mundo nos todo ha gustado siempre la crónica social o el periodismo rosa, porque es interesante, porque al final ves la vida de otras personas y en unas te ves reflejado y otras te provocan rechazo. Ha sido desde siempre parte de la humanidad, igual que algún abuelito se sienta en el pueblo y ve pasar a la gente y opina. Es parte de la condición humana y lo que importa es hacerlo con cariño y con respeto.

Si pudiera elegir una imagen que tener de Ana Obregón, ¿cuál querría?Esta es una grandísima pregunta… no sabría qué elegir, quizá una mirada de Ana Obregón a su hija o nieta, que creo que es el reflejo del sufrimiento de una madre y del amor por un ser recién nacido. De hecho será la primera vez que veamos a Ana Obregón abrazando a su hija.

¿Cómo han hecho para proteger la identidad de la menor?Bueno, no se tiene por qué ver la cara del menor. Hay que preservar la intimidad del menor. La imagen que importa es el mensaje que te da su imagen. En este caso es un mensaje de amor, de maternidad, de ilusión para ella. Luego está el tema de la gestación subrogada, que va por otra parte y que es un debate amplísimo y dificilísimo y que todavía no está desarrollado, aunque es una realidad que un montón de gente que se va fuera de España a tener una gestación subrogada. Los españoles todavía debemos tener ese debate para decidir cuál es la posición, que ahora mismo es el no.