Juan Carlos I llega a España para una visita de cuatro días a Sanxenxo

El rey emérito, a su llegada al aeropuerto de Vigo
El rey emérito, a su llegada al aeropuerto de Vigo
EFE
El rey emérito, a su llegada al aeropuerto de Vigo
El Rey emérito Juan Carlos I ha aterrizado este miércoles en Vigo casi un año después de su última visita a España en mayo de 2022.
Europa Press

El rey emérito ha aterrizado este miércoles en el aeropuerto de Vigo (Pontevedra), en la que será su segunda visita a España desde que reside en Abu Dabi. Juan Carlos I ha llegado procedente de Londres pasadas las 13.30 horas y a continuación se ha desplazado a la localidad de Sanxenxo, donde se alojará hasta el próximo domingo para asistir a una regata.

En el aeropuerto de Vigo estaba previsto que le recogiera su amigo y presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo, Pedro Campos, como en la visita anterior que realizó Juan Carlos de Borbón, en mayo de 2022. Campos salió esta mañana de su casa en dirección al aeropuerto de Peinador, donde ha aterrizado el avión Bombardier 5000, propiedad de una empresa de jets privados de Abu Dabi

Sobre las 13.40 horas de la tarde se abrió la puerta del avión y un coche de color gris, un Mercedes suv de alta gama, se detuvo en la pista del aeropuerto, muy cerca de la escalerilla de la aeronave, por la que minutos después descendió Juan Carlos I sin ayuda de ninguno de sus asistentes, solo sujetándose a las barandillas. El rey emérito se introdujo enseguida en el coche, en el puesto del copiloto, que salió poco después del aeropuerto.

En la anterior visita hace casi un año, el emérito se alojó en la residencia de Campos. Esta vez, el empresario ha guardado en todo momento un silencio sepulcral desde que se filtró la noticia de que el ex jefe del Estado visitaría España y tampoco ha querido confirmar motu proprio si volvería a ser su anfitrión. No obstante, aproximadamente una hora después de aterrizar, el emérito llegó a junto a su amigo a la vivienda de este en Sanxenxo. No hizo declaraciones, pero al decelerar la marcha para poder pasar entre los numerosos medios de comunicación que se agolpaban desde primera hora de la mañana en los alrededores de la casa, Juan Carlos de Borbón saludó a los periodistas sin bajar la ventanilla.

El silencio de Campos y de prácticamente todos los detalles que rodean a la visita de Juan Carlos I puede deberse al "malestar" que este viaje genera en Zarzuela. Según las fuentes consultadas por Europa Press, en la Casa del Rey tuvieron noticia de los planes el emérito por la prensa, sin que hubiera una comunicación previa de sus intenciones.

Hace un año, la visita de Juan Carlos de Borbón a Sanxenxo estuvo rodeada de mucha expectación mediática y se siguieron todos sus movimientos, muy lejos de la privacidad con la que la Casa del Rey había manifestado que quería que transcurrieran este tipo de desplazamientos. No gustó en absoluto en Zarzuela y así se lo hizo ver Felipe VI a su padre en el almuerzo que compartieron el 23 de mayo del año pasado.

Y ahora, la segunda visita a la localidad gallega para asistir a una regata es vista en la Casa Real como particularmente "inoportuna", dada la proximidad con las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo y, por tanto, en periodo preelectoral. Eso sí, reconocen que se trata una decisión personal del padre del rey y la enmarcan en su vida privada, como también ha hecho el Gobierno.

Desde la última visita hace casi un año, Juan Carlos de Borbón y el rey Felipe VI se han visto dos veces: en septiembre de 2022 con ocasión del funeral de Isabel II en Londres, y en enero de este año en el de Constantino de Grecia, hermano de la reina Sofía.

No se reunió con Carlos III

Juan Carlos I ha aterrizado en tierras gallegas procedente de Londres, donde ha pasado dos días. Allí cenó el lunes con un grupo de amigos en Oswald's, un club privado en el centro de la capital británica, donde fue fotografiado por el Daily Mail. No se reunió, sin embargo, con Carlos III, después de que la Casa Real británica y la Embajada en España descartaran la cita.

El rey emérito concluyó su periplo londinense en el estadio Stamford Bridge, donde el martes por la noche asistió al partido de vuelta de cuartos de final de la Liga de Campeones entre el Chelsea y el Real Madrid, invitado por el presidente merengue, Florentino Pérez.

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