Pedro Sánchez sube la apuesta. Tras lograr el desbloqueo de la ley de vivienda, este sábado el presidente del Gobierno ha anunciado la movilización de 50.000 casas de la Sareb -antes llamado el "banco malo"- para alquiler asequible "para jóvenes y familias" y se ha comprometido a aumentar del 3% actual al 20% el parque público de viviendas en los próximos años. Se confirma así que el PSOE pondrá la vivienda en el centro de la campaña de las elecciones municipales y autonómicas del próximo 28 de mayo.

La intención del jefe del Ejecutivo es aprobar el próximo martes, en Consejo de Ministros, un plan que incluya la movilización de las 50.000 viviendas. Según fuentes de Moncloa, se pondrán "a disposición" de municipios y comunidades autónomas 21.000; se promoverá la construcción de otras 15.000 en suelos de la entidad pública; y se "impulsará" el alquiler social de otras 14.000 "ya habitadas". Sánchez dijo querer ir "un paso más allá" para resolver el "problemón" de la vivienda, al que le puso números: según el presidente, el precio del metro cuadrado entre 2014 y 2021 se ha incrementado un 11% en compra y un 45% en alquiler.

"Esa es la gran diferencia entre unos y otros", ha proclamado Sánchez ante 4.000 personas en Valencia, donde ha cerrado la convención municipal que el partido ha celebrado este fin de semana para terminar de poner a punto la maquinaria electoral de cara a los comicios del próximo mes. Se ha referido el presidente al "banco malo", que fue creado por el Gobierno de Mariano Rajoy hace más de diez años para absorber a las entidades financieras en quiebra, quedarse con los llamados activos tóxicos y que terminó "dejando una deuda de 35.000 millones de euros". "Con el PP siempre pasa lo mismo: se privatizan las ganancias y se socializan las pérdidas", ha declarado.

El presidente también se ha comprometido -aunque con mucha menos concreción- a aumentar el parque público de vivienda del 2,5% actual al 20%. La media europea es del 9,3 % y en países más avanzados, como Dinamarca o el Reino Unido, la cifra aumenta hasta el 20 %. Con todo, Sánchez vuelve a contraponerse así a su antecesor en la Moncloa. Esta vez, en política de vivienda, a la que el Ejecutivo le da absoluta prioridad en su relato. Además, también recupera la iniciativa tras dejar que fueran ERC y EH Bildu quienes se apuntaran el tanto del desbloqueo de la ley de vivienda el pasado viernes.

Fueron dos diputados de los socios independentistas del Gobierno quienes anunciaron que finalmente se aprobaría el articulado, que ha estado estancado en el Congreso de los Diputados durante meses tras llegar a un acuerdo el PSOE y Unidas Podemos en octubre de 2021. "Si hay ley de vivienda es gracias a ERC y a EH Bildu", dijeron los parlamentarios Oskar Matute y Pilar Vallugera. No obstante, pese a dejar la venta a los socios, el Gobierno se puso en marcha para rentabilizar el anuncio: el presidente puso un tuit y hubo sendas atenciones a medios de Raquel Sánchez, ministra de Transportes; Pilar Alegría, portavoz del PSOE; y Patxi López, portavoz de los socialistas en el Congreso.

El PSOE propone multar a los clientes de prostitución, crear una 'UME local' y prohibir nuevos pisos turísticos

"Salimos a ganar"

El anuncio de Sánchez ha sido el colofón para la fiesta municipal socialista, que ha reunido a más de 2.000 asistentes este sábado y este domingo en Valencia. Ha servido, por una parte, para cerrar un acuerdo marco en el que se han incluido medidas como sanciones a los clientes de prostitución o la prohibición de nuevos pisos turísticos; y, por otra, para insuflar ánimo al partido, que está ya "muy movilizado". "Veo mucho alcalde y habrá más a partir del 28 de mayo", ha declarado. 

El presidente también ha aprovechado para mandar recados a su izquierda y a su derecha. "No nos importa compartir la bandera del feminismo", ha dicho en plena pugna con Unidas Podemos por la ley del 'solo sí es sí'. "Ahora que hay alguno que muestra ciertas dudas, los socialistas no tenemos ninguna: vamos a ganar", ha asegurado, en relación a lo que en Ferraz ven como "una recogida de cable" de Alberto Núñez-Feijóo, presidente del PP, la decisión de enfriar las expectativas de Génova respecto a las elecciones.