La restauración de una locomotora fabricada en la antigua Maquinista de Barcelona avanza en sus últimas fases para presidir el hasta ahora llamado Parque de la Maquinista, que pasará a llamarse Parque de los trabajadores y trabajadoras de La Maquinista. Esta restauración se está llevando a cabo en las instalaciones de Alstom por parte de trabajadores de la empresa en horas voluntarias.

Se trata de una locomotora de tren que se fabricó en La Maquinista Terrestre y Marítima, MTM, en 1963 y es propiedad de Ferrocarriles Españoles para su conservación. Tras su fabricación en Barcelona, la locomotora prestó servicio en Santander dedicada a maniobras entre estaciones, depósitos y talleres de la red ferroviaria estatal.

Ajuntament de Barcelona

Hace unos meses, esta locomotora se trasladó a Santa Perpètua de Mogoda, donde se encuentran las instalaciones de Alstom, para su restauración, esencialmente de pintura y chapa, y posterior traslado a la fachada del museo de los antiguos trabajadores, la Fundación Museo Histórico-social de La Maquinista Terrestre y Marítima y Macosa, dentro del Parque de la Maquinista.

Cambio de nombre del Parque de la Maquinista

Coincidiendo con la instalación de esta locomotora, el hasta ahora llamado Parque de la Maquinista cambiará de nombre para recordar el pasado fabril del barrio y para evitar la confusión con el actual centro comercial.

Este cambio de nombre, propuesto por la propia Fundación, fue aprobado por la Mesa de memoria del distrito y por el Consejo plenario del distrito, antes de confirmarse por la Ponencia del Nomenclátor de la ciudad.

Recuperando el pasado obrero de Sant Andreu

Esta iniciativa coincide con la inauguración hace pocos días del Museo de la Vivienda Obrera en las antiguas Casas Baratas de Bon Pastor y la próxima apertura del Centro de Interpretación del Trabajo en el Recinto de la Fabra y Coats de Sant Andreu. Además, se está rehabilitando también la Casa del Agua de la Trinitat Vella, que recuerda la importancia del abastecimiento de recursos a los barrios y antiguos pueblos del Pla de Barcelona.

De esta forma, y de la mano de las diversas entidades de memoria y de extrabajadores de estas industrias, se recupera el pasado fabril de los barrios del distrito de Sant Andreu.