Turquía ha reconocido este jueves "avances" en los pasos dados por Suecia y Finlandia en la lucha contra el proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), pero insuficientes de momento para dar luz verde a su ingreso en la OTAN, por lo que el proceso seguirá al menos hasta junio. "Estamos contentos con los pasos que Suecia y Finlandia han dado en la lucha contra el PKK, pero no es suficiente", dijo el portavoz de la Presidencia turca, Ibrahim Kalin en Bruselas, tras participar en una reunión celebrada en la capital belga entre representantes turcos, suecos y finlandeses.

"Hemos dejado claro que hay que dar pasos para impedir actividades de financiación y la propaganda del terrorismo. Nuestros colegas de Suecia nos han hecho saber que esto será más eficaz con la ley en la mano", agregó el portavoz, citado por la agencia turca Anadolu y refiriéndose a un proyecto de ley sueco para endurecer la lucha contra el terrorismo en el país nórdico.

"La ley sueca para la lucha antiterrorista entrará en vigor el 1 de junio y entonces se podrán dar pasos más rápidos, nos dicen. Es una fecha que han puesto ellos", dijo Kalin, descartando avanzar con mayor velocidad, aunque subrayó que "no es Turquía la causa del retraso".

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"En el pasado, otros países han hecho esperar a los nuevos miembros largo rato. Me refiero a la actitud de Grecia", agregó Kalin, en aparente alusión al bloqueo de Atenas a la candidatura de Macedonia del Norte. El encuentro formó parte del mecanismo conjunto permanente establecido por el memorando trilateral firmado en los márgenes de la cumbre de la OTAN en Madrid en junio pasado y se trataba de la tercera reunión de este formato.

"Esperamos que el acuerdo de Madrid se implemente entero. Hemos expresado nuestras preocupaciones de seguridad concretas. Y en la reunión de hoy hemos acordado que dentro de poco vamos a celebrar otra reunión", concluyó Kalin.

De los 30 socios de la OTAN, solo Turquía y Hungría faltan por ratificar la entrada de Finlandia y Suecia, que desde junio pasado tienen el estatus de “invitados” a unirse a la Alianza y pueden así participar en sus actividades, si bien no están legalmente cubiertos por el principio de defensa colectiva bajo el paraguas del pacto militar si se ven atacados.