El presentador de televisión, Iñaki López, ha reaparecido este martes en el programa Más vale tarde de LaSexta tras haberse ausentado un tiempo por motivos de salud y ha desvelado cuál ha sido la causa de lo que le ha ocurrido. Con un visible ojo morado, el presentador ha bromeado sobre su aspecto, asegurando que aunque es "joven" y "dado a la vida nocturna", "no tiene nada que ver con eso". Tras reencontrarse con sus compañeros, Iñaki López ha contado que ha sufrido, por segunda vez, un desprendimiento de retina. "Parece que podré volver a veros más antes que tarde, porque de momento para mí sois solo sombras y os reconozco y ubico solo por el sonido de las voces", señalaba.

Pero, ¿en qué consiste este problema? La retina es "la capa del fondo del ojo" encargada de captar "los estímulos luminosos" y percibir las imágenes que después "serán enviadas a nuestro cerebro", explica el doctor Manuel Sáenz de Viteri Vázquez, especialista del departamento de Oftalmología de la Clínica Universidad de Navarra (CUN). Cuando hay un desprendimiento de esta retina, "se produce la separación espontánea de la retina neurosensorial (capa interna de la retina) del epitelio pigmentario (capa externa)".

Cuáles son los signos de alerta

Se trata de un problema grave, puesto que la retina no funciona cuando está desprendida y provoca un problema de visión. ¿Y por qué se produce? Cuando vamos envejeciendo, "el vítreo en nuestros ojos se empieza a encoger y a hacerse más finito". En este sentido, al mover nuestro ojo, el vítreo también se mueve alrededor de la retina sin problemas, "pero a veces el vítreo puede pegarse a la retina y jalar lo suficientemente fuerte como para desprenderla. Cuando sucede eso, el líquido puede pasar a través del desgarro y desprender la retina", detallan en la Academia Americana de Oftalmología. 

¿Y cuáles son los signos de alerta? En muchos casos, el desprendimiento viene precedido de la "aparición súbita de moscas volantes o un aumento brusco de las ya existentes, así como la aparición de destellos luminosos", indica el experto de la CUN. Con cualquiera de estos síntomas es imprescindible acudir a una consulta urgente, "ya que en estos momentos el desprendimiento puede no estar instaurado todavía". 

Si ya se ha instaurado el desprendimiento, además de estos síntomas, el paciente podría notar una especie de "sombra" que impide la visión por una parte del ojo. "Es muy importante hacer un diagnóstico precoz, puesto que las posibilidades de mejora son mayores si no se llega a desprender la zona central de la retina llamada mácula", añade.

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Cómo es el tratamiento

El tratamiento de un desprendimiento de la retina se basa en una cirugía para evitar la pérdida completa de visión, aunque existen diferentes técnicas quirúrgicas en función del grado. 

Por un lado, la vitrectomía es un tipo de microcirugía "que se realiza bajo microscopio, realizando tres pequeñas incisiones en la parte blanca del ojo, a través de las cuales se insertan instrumentos muy finos", detallan en la CUN. En primer lugar, se elimina el gel vítreo y, después, "se reaplica la retina neurosensorial sobre el epitelio pigmentario". Posteriormente se tratan los "rotos retinianos" con láser o con crioterapia y, por último, "el ojo se llena de gas o aceite de silicona". 

Por su parte, la cirugía escleral se basa en "coser un segmento de banda de silicona sólida sobre la capa más externa de la pared del ojo". Esta banda se encargará de empujar la pared hacia dentro para que se recoloque la retina desprendida.

Por último, con la técnica de la retinopexia neumática, "se inyecta una burbuja de gas dentro del ojo, sin hacer vitrectomia, y se posiciona al paciente de una manera determinada para que este gas tapone el desgarro y así pueda reaplicarse la retina", concluyen.