El matrimonio formado por Jennifer López y Ben Affleck llevaba meses buscando una casa que convertir en el hogar familiar y a la que mudarse juntos y donde reunir a la hija de Affleck, Seraphina, y los mellizos de López, Emme y Maximilian, todos de 14 años.

Después de ser fotografiados en muchas ocasiones viendo muchas mansiones en los alrededores de Los Ángeles, por fin parecen haberse decidido y según publican medios locales habrían dado ya la señal de reserva de una mansión que la última vez que se vendió costó 34,5 millones de dólares. 

Se trata de una casa que tiene 1.400 metros cuadrados de vivienda, situada en un terreno de 4.000 metros cuadrados rodeados por una buena cantidad de árboles sicomoros. 

La casa tiene siete habitaciones, 13 baños, un garaje para seis coches y casa de huéspedes independiente. Además, hay cuarto para el servicio, bodega y gimnasio y también hay una piscina, un jacuzzi, una cocina al aire libre y cuenta con su propia sala de cine. 

La vivienda está en Los Ángeles, en una lujosa urbanización llamada Pacific Palisades. El diseño es de dos plantas, de estilo Hamptons-esque y predomina el blanco con techo gris claro y detalles en madera natural. 

No todo es comprar. Jennifer López tiene a su vez puesto a la venta su mansión del conocido Bel-Air, donde tiene nueve habitaciones y por la que pide 42,5 millones de dólares, aunque la compró en 2016, por 28 millones.