La Policía Nacional investiga un presunto delito de acoso sexual y contra la intimidad después de que una docena de trabajadores y trabajadoras en prácticas de una cadena hotelera del sur de Tenerife, según ha adelantado el diario El Día.

Concretamente, las empleadas han denunciado que su jefe de recursos humanos realizaba grabaciones sin su consentimiento y con fines desconocidos. Además, accedía sin pedir permiso a los apartamentos en los que las denunciantes residían.

Al parecer, el hombre realizaba grabaciones de audios y vídeos de las trabajadoras denunciantes cuando las mismas se hallaban en sus lugares de trabajo o en el despacho del mismo. Para obtener tales archivos de sonido e imagen, el varón, presuntamente, se valía de una minicámara oculta en un bolígrafo.

El trabajador ha sido suspendido de empleo y sueldo a raíz de la denuncia, aunque otras fuentes explican a El Día que fue apartado semanas antes. La empresa, informan, se ha ofrecido a colaborar con la investigación y ha manifestado que ese tipo de comportamientos resultan intolerables.