El servicio de trenes de Cercanías Madrid se verá afectado entre los próximos meses de febrero a diciembre. Este medio de transporte, empleado a diario por miles de personas en la Comunidad de Madrid junto a otros como el metro o los autobuses, tendrá una renovación en sus infraestructuras, concretamente, en el túnel de Sol, lo que provocará el corte en el servicio entre Chamartín y Nuevos Ministerios y afectará a cinco líneas de Cercanías.

Así, desde el 4 de febrero y hasta el 23 diciembre de este año, aquellos usuarios de Cercanías que viajen en las líneas C-3 (Aranjuez-Chamartín), C-3a (Aranjuez-El Escorial), C-4 (Parla-Cantoblanco), C4-a (Parla-Alcobendas/S.S. de los Reyes) y C4-b (Parla-Colmenar Viejo) tendrán que hacer trasbordos como consecuencia de ese corte del túnel de Sol.

En este sentido, Renfe ha diseñado un plan de alternativas que incluye un aumento de los trenes del 15% (hasta un total de 1.436) y un 6% las plazas sentadas. Además, dispondrán de transbordo a otros servicios de Cercanías desde Chamartín, Nuevos Ministerios y Puerta de Atocha.

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Para los que viajen en sentido norte-sur, el servicio finalizará en Chamartín, donde los usuarios de Cercanías podrán continuar su recorrido en los trenes que circulan hacia Atocha por el túnel de Recoletos: líneas C1, C2, C7, C8 y C10.

Para aquellos que realicen el viaje de sur a norte, las estaciones de inicio/fin de servicio serán Atocha o Nuevos Ministerios. En ambas terminales, los viajeros podrán continuar su desplazamiento en el resto de servicios de Cercanías que circulan por el túnel de Recoletos: líneas C1, C2, C7, C8 y C10.

Desde Renfe han aclarado que para garantizar que los viajeros son conocedores de esta situación se hará una campaña de publicidad en medios, redes, en la web de Renfe y App de Cercanías. También se contratarán 157 personas más para atención al cliente (hasta los 700) y se repartirán folletos, se vinilarán trenes y se avisará por megafonía.