Un pesebre sorprendente y audiovisual iluminará la Navidad Barcelona

  • El Ayuntamiento probará una experiencia de 'mapping'.
El pesebre de 2021 de Barcelona extendió sus figuras luminosas por la calle Ferran.
El pesebre de 2021 de Barcelona extendió sus figuras luminosas por la calle Ferran.
AYUNTAMIENTO DE BARCELONA
El pesebre de 2021 de Barcelona extendió sus figuras luminosas por la calle Ferran.

El  pesebre de esta Navidad en Barcelona "continuará sorprendiendo",  algo a lo que el Ayuntamiento de la ciudad ha acostumbrado a los ciudadanos en los dos mandatos de la alcaldesa Ada Colau. 

El nacimiento nada tradicional volverá a la plaza de Sant Jaume, y se quedará instalado hasta el próximo 6 de enero de 2023. Seguirá la estela del que se colocó el año pasado no solamente en la plaza sino también en la calle Ferran, y que constaba de figuras del pesebre que colgaban lumínicamente tanto de la fachada del Ayuntamiento como de las de otros edificios del trazado, que se asomaba a La Rambla y a la Via Laietana. 

En 2020, la pandemia de coronavirus impidió desplegar esta tradición navideña para evitar las aglomeraciones de gente en plena pandemia de coronavirus. 

La inauguración de la nueva apuesta de pesebre barcelonés llegará dos días después del encendido oficial de las luces de Navidad, que será el jueves 24 de noviembre a las 18 horas con un acto central que tendrá lugar en Nou Barris, siguiendo la política de descentralización de este tipo de actividades por parte del consistorio. 

El coste del pesebre de Sant Jaume de este año es de unos 100.000 euros, la mitad del presupuesto del del año 2021. A pesar de ello, será un montaje "sorprendente", indicó recientemente el teniente de alcalde de Cultura, Jordi Martí. También avanzó algunos detalles la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau: "Será más telemático, más audiovisual, menos clásico, más de 'mapping'". 

En la esquina de la plaza de Sant Jaume con la calle de Jaume I ya está colocado el árbol de Navidad, que el año pasado se decoró con motivos animales. El bestiario tradicional también fue el protagonista del pesebre innovador del año pasado, con el buey, que ocupó la fachada del Ayuntamiento, y la mula, que lo hizo en la del edificio de la Generalitat de Catalunya. 

La plaza también se iluminó con otras figuras animales propias del nacimiento más tradicional, como gallinas, cercos, ratones y perros. 

El año pasado, la figura del Niño Jesús se colocó en un humilde portal de vecinos de las calles de Jaume I y Ferran.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento