El Gobierno ha enviado este sábado a la Comisión Europea el plan presupuestario de 2023 en el que, por primera vez, contempla un escenario alternativo de ingresos y gastos debido al "alto nivel de incertidumbre y de inflación derivados del conflicto bélico de Ucrania". En este 'plan b', el Ministerio de Hacienda admite ante Bruselas una mayor previsión de ingresos por impuestos, concretamente, 23.000 millones de euros más para 2023.

El objetivo de este colchón extra iría dirigido a "prorrogar y adoptar aquellas medidas más adecuadas, con el fin de proteger a las familias, trabajadores y empresas más afectadas por la crisis energética", recoge el plan elaborado por Hacienda.

La cifra de 23.000 millones de euros adicionales se desprende de lo que el departamento que dirige María Jesús Montero ha expuesto dentro del denominado "escenario dos" de dicho plan presupuestario. 

En este caso, la previsión de los ingresos por impuestos actualizada a octubre de 2022 se sitúa en 331.188 millones de euros, lo que supone un crecimiento de un 11,8%. Para 2023, detalla el plan, "los impuestos alcanzarán los 354.283 millones de euros, aumentando, por tanto, un 7% respecto a 2022". Esto es, 23.000 millones de euros más.

Según ha detallado Hacienda en un comunicado, el segundo escenario contempla un punto de partida de ingresos en 2022 "mejor de lo esperado, en base a los buenos resultados de la liquidación del IRPF y del Impuesto de Sociedades por el dinamismo del empleo y el sólido crecimiento económico".

El Ejecutivo detalla, asimismo, que en este escenario "se recogen, entre otras medidas, el impacto positivo adicional de la limitación en la compensación de pérdidas en los grupos en el Impuesto sobre Sociedades, así como la recaudación derivada del impuesto de solidaridad de las grandes fortunas".

Primer escenario

Por su parte, el primer escenario, el más conservador, expone lo incluido anteriormente en los Presupuestos Generales del Estado. En este sentido, el Plan Presupuestario de 2023 recoge que los ingresos totales del conjunto de las Administraciones Públicas supondrán un 42,3% del producto interior bruto (PIB), con 587.609 millones de euros en términos de contabilidad nacional.

Por el lado de los gastos, contempla para el total de Administraciones Públicas un peso del 47,1% sobre el PIB en 2022 y del 46,2% para 2023.

En el caso de la partida de impuestos, el primer escenario diseñado en los Presupuestos calcula que la recaudación alcance los 344.627 millones (un 7,6% más que en 2022), una cifra que el segundo escenario eleva a 354.283 millones, lo que supone 9.656 millones adicionales.

En cualquier caso, Haciendo subraya en su comunicado que el plan remitido este sábado a Bruselas refleja "el compromiso del Gobierno con el saneamiento de las cuentas públicas", y añade que la previsión de déficit de 2023 se sitúa en el 3,9%, lo que supone una reducción frente al 5% de 2022.

"El documento deja claro a las autoridades europeas que la prioridad de los Presupuestos de 2023 son la justicia social, mediante el fortalecimiento del Estado del Bienestar, y la eficiencia económica a través del crecimiento y la creación de empleo de calidad impulsada por la transformación del modelo productivo", señala el Ejecutivo.

"Todo ello sin olvidar el compromiso del Gobierno con la estabilidad presupuestaria, como demuestra la reducción de déficit público y de deuda pública previstas para el próximo año y que continúan una senda descendente iniciada en 2021", resalta.