En apenas unos días, la vida de Tamara Falcó ha dado un giro sorprendente. Tras anunciar su compromiso con Íñigo Onieva en Instagram, se filtraba un vídeo en el que el empresario le había sido infiel durante un festival en Estados Unidos. Poco después, la marquesa de Griñón borraba la publicación de su red social y el martes hacía sus primeras declaraciones ante los medios.

Lo que no sabía es que dichas declaraciones acabarían convirtiéndose en tendencia en redes sociales. Tamara Falcó habló con la prensa a su llegada a un evento en el Teatro Real confirmando la ruptura con Íñigo Onieva y asegurando que era "imposible" una segunda oportunidad. 

Sobre la duración del beso con la mujer que se observa en el vídeo, Falcó revelaba lo que le había dicho a su ya exprometido: "Le dije 'que sepas que me da igual que hayan sido seis segundos o un nanosegundo en el metaverso, como esto sea verdad, esto acaba'". Una nueva unidad de medida muy ocurrente que ahora es viral en redes sociales. 

A qué conceptos se refería

Pero, ¿qué es un nanosegundo y qué es el metaverso? En primer lugar, un nanosegundo es una unidad de medida que hace referencia a la milmillonésima parte de un segundo, y es utilizada en ámbitos como la química, la informática o la física cuántica. Así, primero estarían los segundos, después los milisegundos (milésima parte de un segundo), los microsegundos (millonésima parte) y ya nos encontraríamos a los nanosegundos.

Por otro lado, el metaverso es un mundo o realidad digital que tiene como propósito cambiar la forma en la que nos relacionamos con el exterior. Por tanto, sería un ecosistema virtual y en 3D en el que los usuarios se conectarían a través de dispositivos, como gafas de realidad virtual o aumentada, para interactuar.

La diferencia con un mundo de fantasía como el que vemos en videojuegos es que el metaverso es "una especie de realidad alternativa en la que podremos hacer las mismas cosas que hacemos hoy en día fuera de casa, pero sin movernos de la habitación", detallan en Xakata. Por tanto, podrías comprar objetos, trabajar, tener reuniones digitales, crear un negocio, ejecutar operaciones económicas, comprar una vivienda, un coche o hablar con los avatares de otras personas, entre otras funciones.