La Guardia Civil ha analizado más de 70 muestras de restos biológicos en el chalé de Óscar S. en busca de correspondencia con el ADN de Esther López, la mujer de 35 años de Traspinedo que desapareció la madrugada del 13 de enero. Sin embargo, no se ha encontrado material genético perteneciente a la vecina de esta localidad en dicha vivienda, según ha informado El Norte de Castilla. 

Durante varios días se realizó una intensa búsqueda con drones y perros para encontrar a la mujer. Sin embargo, su cuerpo fue hallado finalmente el pasado 5 de febrero, 24 días después de su desaparición, por un residente de Salamanca en la cuneta de una carretera que conduce a su pueblo natal.

Declaración respaldada por pruebas

El Servicio de Criminalística de la Guardia Civil ha concluido que ninguna de las muestras recopiladas en la vivienda de verano del investigado tienen el ADN de Esther. Este resultado concuerda con las declaraciones de Óscar S., quien negó ante una jueza instructora que su amiga hubiera estado en su casa de El Romeral. Además, reafirmó que tras haber discutido porque ella quería seguir de fiesta en Valladolid, Esther se bajó del coche en el cruce que conduce a la urbanización y después no la volvió a ver. 

En el informe de la Guardia Civil se detallan casi todas las muestras de ADN recogidas; desde las halladas en los picaporte de las puertas hasta las encontradas en los interruptores de la luz. Además, se encontraron cuatro colillas de cigarros de la misma marca que fumada la víctima en la papelera de la cocina. Todo el material genético recopilado corresponde con el ADN del principal sospechoso.

Sangre del padre en la vivienda

Adicionalmente, el informe indica que existe "una posible compatibilidad biológica peternofilial" entre el ADN del investigado y las manchas de sangre halladas en el reposabrazos de uno de los sillones de la vivienda. Por lo tanto, se cree que esas manchas puedan ser del padre de Óscar S.

Se encontró también material genético de tres mujeres, que corresponden con los restos biológicos hallados en el coche del investigado. Los pelos hallados en el interior y en el exterior del chalé de Óscar tampoco son de Esther López. Por esto, se concluye que no existen pruebas de que la víctima haya estado en la vivienda.