Una niña de 9 años es la víctima más reciente de la violencia armada de las bandas de Liverpool. La menor fue asesinada este lunes cerca de las 10 de la noche en su propia casa localizada en el área Knotty Ash cuando un pistolero abrió fuego contra otro hombre frente a la vivienda de la niña sin importarle el peligro al que se enfrentaban aquellos que estaban dentro de la casa, según ha confirmado la policía a varios medios ingleses.

El pistolero estaba persiguiendo a un hombre de 35 años que intentó refugiarse en la casa de Olivia Pratt-Korbel, la menor asesinada. Según ha indicado la policía, la madre, Cheryl Korbel, de 46 años, abrió la puerta principal de su casa al escuchar disparos y cuando trató de cerrarla el atacante disparó, causándole una herida en la mano. Olivia, quien se encontraba detrás de ella en las escaleras, también resultó herida de gravedad.

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El pistolero, que iba vestido todo de negro, siguió intentando entrar en la vivienda, disparó un par de veces más a su objetivo previsto y se dio a la fuga. Poco después, apareció un Audi negro. De él salieron miembros de la banda a la que pertenecía el hombre atacado y se lo llevaron. Momentos más tarde llegó la policía y Olivia fue trasladada al Hospital de niños Alder Hey. Sin embargo, los paramédicos no pudieron hacer nada por ella y finalmente falleció. Según la policía, no había conexión entre el hombre perseguido y la familia de Olivia.

Histórica violencia armada

Liverpool sufre de violencia armada desde muchos años. Las bandas de narcotraficantes rivales llevan a cabo constantes ataques en los que a menudo resultan heridas personas inocentes que quedan atrapadas en las balaceras. El 16 de agosto, Sam Rimmer, de 22 años, fue asesinado mientras paseaba con sus amigos. Cinco días más tarde, Ashley Dale, de 28 años, fue baleada en el jardín de su casa "por error", según aseguró la policía. Además, el mismo día que murió Olivia una mujer de aproximadamente 50 años también fue apuñalada en el aparcamiento de un pub.

El superintendente jefe de detectives, Mark Kameen, instó a los miembros de la organización criminal a "examinar sus consciencias" y presentar información acerca de la identidad del asesino de Olivia. Además, la policía ha insistido que la comunidad debe "romper el código de silencio" y aportar cualquier información que pueda resultar de utilidad. 

Boris Johnson, por su parte, ha expresado que el asesinato de Olivia es una "tragedia inimaginable" y prometió que la policía de Merseyside obtendrá "todo lo que necesiten para atrapar a los responsables".