La polémica por la utilización de caballos para pasear turistas en calesa en Palma de Mallorca se ha reavivado este martes tras la publicación en Internet de un vídeo en el que se ve cómo varios turistas permanecen subidos al carruaje incluso después de que uno de los caballos que tiraban se desplomase por la ola de calor.  

Ocurrió el domingo en la plaza Joan Carles I. La publicación del vídeo en redes sociales ha reavivado la demanda ciudadana de que el Ayuntamiento prohíba el uso de animales de tiro con fines turísticos, al menos en épocas de altas temperaturas.

El el vídeo se ve cómo varios transeúntes se acercan y piden agua para el animal, mientras los turistas siguen montados en la calesa. El caso no llegó a denuncia porque el animal volvió a ponerse de pie y siguió camino.

El Ayuntamiento de Palma, sin embargo, está estudiando la iniciativa de sustituir los caballos de las galeras por una alternativa eléctrica en aras del bienestar animal, a petición de Ciudadanos.  

Según varios medios locales no es la primera vez que se desploma un caballo de las calesas turísticas de Palma, sino que al menos habría ocurrido en tres ocasiones en los últimos meses. En junio, de hecho, se pidió la retirada de la licencia a un conductor de galera por forzar a un caballo a caminar con cojera. 

La petición popular en change.org para prohibir las galeras ha sumado diez mil firmas las últimas horas superando las 63.000 en total.