Hace años que Ernesto de Hannover y su hijo mayor, Ernesto Jr., comenzaron una guerra judicial que podría estar llegando a su fin. Sin embargo, lo hace con malas noticias para el todavía esposo marido de la princesa Carolina de Mónaco.
El Tribunal civil de Hannover ha dictado ahora la desestimación de la demanda que presentó Ernesto por la devolución del castillo de Marienburg, uno de los emblemas de la Casa Hannover, que le reclamaba a su hijo judicialmente.
El menor de los Hannover recibió el patrimonio entre 2004 y 2007 como una herencia anticipada. Tras hacerse con ello, Ernesto Jr. quiso venderlo a la Administración por un simbólico precio: un euro. La principal razón es que el castillo tiene unos altos costes de mantenimiento, los cuales no puede asumir él.
Ante esas informaciones, el marido de Carolina de Mónaco se enfadó y le puso una demanda para intentar recuperar la propiedad, lo que dio comienzo a años de batallas judiciales en las que también se encuentra inmersa EAH BetriebsgmbH, una empresa de Salzburgo. Esa entidad acudió a los tribunales porque el príncipe alemán les había vendido sus activos.
La sentencia ha decretado que Ernesto Jr. no tiene que devolver el castillo de Marienburg a su padre. El marido de Carolina de Mónaco puede contraatacar apelando la decisión hasta el próximo 1 de agosto.
Además, los jueces no consideran real la "grosera ingratitud" de Ernesto Jr. frente a su padre. Además, acusó a su hijo de no visitarle cuando estuvo enfermo, lo que también ha sido tildado de incoherente.
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