Acuerdo para que Silence ocupe a parte de los trabajadores de Nissan, que protestan hoy por el retraso en la reindustrialización

Protesta de los trabajadores de Nissan en el Passeig de Gràcia de Barcelona, desde la sede de Empresa y Trabajo hasta la Delegación del Gobierno.
Protesta de los trabajadores de Nissan en el Passeig de Gràcia de Barcelona, desde la sede de Empresa y Trabajo hasta la Delegación del Gobierno.
Miquel Taverna
Protesta de los trabajadores de Nissan en el Passeig de Gràcia de Barcelona, desde la sede de Empresa y Trabajo hasta la Delegación del Gobierno.

La dirección de Silence y los comités de empresa de Nissan han llegado a un acuerdo este martes por la noche para "desencallar" el aterrizaje de la compañía catalana en las plantas que ocupaba la multinacional japonesa hasta su cierre a finales del año pasado, según ha informado el conseller de Empresa y Trabajo de la Generalitat, Roger Torrent.

Los trabajadores de Nissan, que fueron despedidos el pasado diciembre, han salido este miércoles a las calles de Barcelona para protestar contra los continuos retrasos en la reindustrialización de las plantas de Zona Franca y Montcada i Reixac. La movilización ha comenzado a las 10:30 horas en la sede del Departamento de Empresa y Trabajo de la Generalitat y se ha dirigido hasta la Delegación del Gobierno. 

Sobre el acuerdo con Silence, el portavoz de Sigen-Usoc en Nissan, Miguel Ruiz, ha remarcado durante la protesta que esta empresa prevé contratar "a 110 trabajadores, y somos 1.400 a reindustrializar", por lo que el proyecto es "un complemento importante", pero no soluciona la situación de la mayoría de los empleados. 

Por su parte, el secretario general de CC.OO. Nissan, Miguel Ángel Boiza, ha señalado que este acuerdo "es un inicio", pero que el proceso "no va por buen camino". Y es que la reindustrialización ha sufrido diferentes contratiempos: por una parte, el 'no' del gigante asiático automovilístico Great Wall Motors -un proyecto más parecido a la actividad que venía haciendo Nissan- y, más adelante, la retirada del proyecto de los dueños de la planta de Sant Andreu de la Barca.

Así, para las plantas de Zona Franca y Montcada i Reixac, que continúan en el proceso de reindustrialización, hay dos proyectos previstos para retomar la actividad y los puestos de trabajo: el principal es el 'hub' de descarbonización liderado por QEV Technologies y Btech y, por otra parte, la empresa catalana de movilidad eléctrica Silence.

Sin embargo, la protesta de este miércoles se debe, principalmente, al  retraso que ha provocado la propuesta del Consorci de la Zona Franca, propietario de los terrenos, de presentar un concurso público para encontrar un único operador que alquile el espacio a los diferentes proyectos industriales, lo que "está dilatando más el proceso de lo que se esperaba en un inicio", señalan desde UGT.

De hecho, los plazos pactados marcaban el 30 de junio de 2022 como la fecha en la que iban a arrancar los nuevos proyectos, pero el concurso podría no estar listo hasta finales de julio o principios de agosto. Ruiz ha recordado que en la reunión celebrada a mediados de marzo se prometió que este concurso estaría publicado al cabo de un mes, pero dos meses después todavía no se ha hecho. 

"Hay que presentarlo ya; es necesario acelerar el proceso al máximo", ha pedido Ruiz en declaraciones a los medios durante la movilización de este miércoles. "No podemos aceptar y consentir que sea la administración quien está paralizando la puesta en marcha de los distintos proyectos industriales", ha añadido.

Uno de los trabajadores de Nissan, José Antonio, cuenta en declaraciones a 20minutos que la situación de incertidumbre en la que se encuentra la plantilla "está influyendo en la salud de los trabajadores y ya estamos hartos". Así, reclama a administraciones y empresas que "sean claros y transparentes y que no nos engañen". Sobre su situación, explica que llevaba "22 años en la empresa y he ido de engaño en engaño, porque esto 'iba bien' y mira lo bien que iba que nos han cerrado".

Boiza, por su parte, ha explicado que los trabajadores están viviendo un momento "de mucho nerviosismo porque, cuando se fueron a la calle, sabían que había unos plazos, que había hasta el 30 de junio para cerrar esto, y ahora ven que se retrasa y que los proyectos empiezan a tener dudas de su arranque por ese retraso. La gente está preocupada y por eso hacemos esta movilización, para que sepan que hay gente en la calle que necesita trabajar".

Acuerdo con Silence

En cuanto al acuerdo con Silence, Torrent ha asegurado que blinda los puestos de trabajo de esos empleados para los próximos años: "Gracias al trabajo que han hecho los agentes presentes en la mesa de reindustrialización, estamos convencidos de que el proceso terminará con éxito y conseguiremos mantener la continuidad industrial, y lo que es más importante, los puestos de trabajo".

Sobre este acuerdo, Boiza ha explicado que la administración catalana "tenía mucho interés en Silence y se han volcado", pero ha remarcado que "no es la solución en la reindustrialización de Nissan". "Es una parte pequeña, importante, pero no es la solución", ha insistido.

En cuanto al anuncio de Torrent, el sindicalista de CC.OO. ha pedido que "dejen de hacer declaraciones como si el proceso de reindustrialización ya estuviera finiquitado y fuéramos por el buen camino porque se ha cerrado Silence. Es un inicio, pero no vamos por buen camino. Sigue habiendo retrasos y se sigue sin poner toda la carne en el asador".

Según Boiza, Silence se comprometió a aceptar las condiciones pactadas, que incluyen un sueldo un 20% superior al convenio de sector y la garantía de trabajo durante tres años, entre otros. Para el sindicalista, éste es un proyecto "importante" pero que ofrece 110 puestos de trabajo y no deja de ser "un complemento" al proyecto principal de reindustrialización, el 'hub' de descarbonización, que se propone fichar a unos 600 trabajadores en 2023 y la misma cifra al año siguiente.

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