El pasado lunes el portal Politico publicaba la filtración de un borrador del Tribunal Supremo de Estados Unidos. Según ese documento, el más alto tribunal de EE UU se prepara para revocar el derecho al aborto, en vigor en el país desde 1973. Horas después, el Supremo confirmaba la autenticidad del borrador y abría una investigación.
El país se ha mostrado convulsionado a lo largo de la semana ante un fallo que podría ilegalizar el aborto en casi todos los estados. La decisión aún podría cambiar y no se espera un veredicto oficial hasta junio. De momento, el presidente Joe Biden ya prepara una "respuesta" para defender el derecho a la interrupción del embarazo.
El aborto es legal en todos los estados de EE UU desde 1973, cuando se leyó la sentencia de la Corte Suprema en el caso Roe contra Wade. Es a ese caso concreto al que se refiere el borrador y por lo tanto las intenciones de una mayoría (conservadora) de los jueces del Supremo norteamericano.
Esa demanda es la base del derecho al aborto en el país, porque sentó jurisprudencia. Por el caso Roe contra Wade la Corte Suprema norteamericana dictaminó que la Constitución de Estados Unidos protege la libertad de una mujer embarazada para elegir abortar sin demasiadas restricciones. Poner en duda aquella sentencia hace temblar todo el edificio construido sobre ella, es decir, el mismo derecho al aborto.
¿Qué fue el caso Roe contra Wade?
Roe era una mujer que quería abortar y Wade, el juez que se lo impedía. En detalle: el caso era el de Jane Roe, quien en 1969 se quedó embarazada de su tercer hijo. Ella quería abortar, pero vivía en Texas, donde el aborto era ilegal salvo para salvar la vida de la madre.
Eso en Texas, porque en aquel momento el aborto era legal en cuatro de los estados de EE UU. En otros 16 estaba permitido pero bajo circunstancias limitadas.
El Estado de Texas apeló directamente ante la Corte Suprema creyendo que su mayoría conservadora les daría la razón
En realidad Jane era Norma McCorvey, que usó el seudónimo de "Jane Roe" para intentar defender su privacidad. Tenía 22 años, era soltera y estaba en paro. Henry Wade era el fiscal de distrito del condado de Dallas (Texas). Le correspondía aplicar la ley estatal que prohibía el aborto excepto para salvar la vida de una mujer.
De modo que las abogadas de la joven, Sarah Weddington y Linda Coffee, presentaron una demanda en su nombre ante un tribunal federal de Estados Unidos contra Wade, alegando que las leyes de aborto de Texas eran inconstitucionales.
Tres jueces del Tribunal de Distrito de EE UU para el Distrito Norte de Texas se ocuparon del caso y fallaron a favor de la mujer. El Estado de Texas recurrió la sentencia, pero directamente ante la Corte Suprema. Y lo hizo así creyendo que su mayoría conservadora les daría la razón.
La cuestión a dirimir era si la Constitución del país reconocía o no el derecho de la mujer a interrumpir su embarazo mediante un aborto. Las abogadas Weddington y Coffee defendieron que la ley de Texas era ambigua y violaba el derecho protegido por la Constitución a la privacidad personal.
Por una mayoría de 7-2 se decidió que sí, que en EE UU se debía proteger el derecho al aborto de la mujer. Pero, como explicó el juez Harry Blackmun en nombre de la Corte, esa protección debía equilibrarse entre los intereses del Gobierno de proteger la salud de la mujer y la posibilidad de vida humana. El Supremo estableció que durante los primeros tres meses de la gestación la decisión de abortar les correspondía a la mujer y a su médico.
Para cuando hubo sentencia, Norma McCorvey ya había dado luz (una niña a la que puso en adopción)
Para entonces, Norma McCorvey ya había dado luz (puso a su niña en adopción). Desde entonces se ganó la vida dando discursos y escribiendo libros sobre el debate en torno al derecho al aborto. Y cambió de opinión. Primero se hizo protestante evangélica, luego católica y finalmente antiabortista. Falleció en 2017, a los 69 años.
El caso Roe contra Wade provocó un intenso debate en Estados Unidos sobre el aborto. En muchos estados la comunidad quedó intensamente dividida entre movimientos a favor y en contra del aborun intenso debate en Estados Unidos sobre el aborto.to. En la práctica, la sentencia del Supremo anuló muchas leyes federales y estatales sobre el aborto.
Planned Parenthood contra Casey
Pero no todo acabó con aquel fallo. Casi 20 años después llegó a la Corte Suprema el caso de Planned Parenthood contra Casey, una imputación a las leyes de aborto en Pensilvania (que incluían un periodo de espera de 24 horas). Era 1992 y Blackmun todavía era uno de los jueces del tribunal, que seguía siendo conservador.
Es una ley y un componente de libertad a los que no podemos renunciar"
Sin embargo, en otra decisión histórica, el Supremo ratificó el derecho al aborto por una mayoría muy ajustada (5-4). La sentencia afirmó el principio central de Roe contra Wade: la mujer tiene el derecho constitucional a interrumpir su embarazo hasta la viabilidad del feto. Como escribieron los jueces Sandra Day O'Connor, Anthony M. Kennedy y David H. Souter, todos conservadores: "Es una ley y un componente de libertad a los que no podemos renunciar".
Desde entonces, los estados conservadores de Norteamérica han ido reducido el derecho a abortar con leyes que muchas veces han acabado ante los tribunales.
El nuevo caso que podría cambiar el fallo
El famoso borrador que se publicó hace unos días tiene que ver con un nuevo caso que ha llegado a la Corte Suprema. Es el caso Dobbs contra la Organización para la Salud de la Mujer de Jackson. Viene de Mississippi y se debe a una ley estatal de 2018 que prohíbe la mayoría de los abortos después de las 15 semanas de embarazo. Esa ley, todo un desafío directo a Roe, fue promulgada por una legislatura estatal dominada por los republicanos.
La última clínica de aborto de Mississippi, esa Organización de Salud de la Mujer de Jackson, demandó contra la ley que prohibía los abortos unos dos meses antes de lo que permitían Roe contra Wade y decisiones posteriores. En diciembre parecía que el Supremo estaba dispuesto a mantener la ley de Mississippi. En este momento la mayoría es claramente conservadora, 6 de 9 magistrados. Sin embargo parece haber división de opiniones sobre si anular los avances de Roe/Wade por completo.
El retrato de la mujer que aborta en EE UU es el de una madre, pobre, soltera, de veintitantos años y un embarazo avanzado
Si finalmente, la Corte Suprema norteamericana ratifica la prohibición de Mississippi se llevaría por delante el marco acordado tras los casos de Roe contra Wade y de Planned Parenthood contra Casey, que básicamente supone que los estados pueden regular pero no prohibir el aborto.
Según el anteproyecto de opinión, ese fallo causaría una variedad de leyes de aborto, con estados que lo protegerían y otros que directamente lo prohibirían. The New York Times cita un análisis del Guttmacher Institute, según el cual si el Tribunal Supremo anula Roe, más de la mitad de los estados prohibirían probablemente o casi con seguridad el aborto.
Según este periódico, el acceso al aborto legal podría terminar las mujeres que viven en gran parte del sur y el medio oeste de Norteamérica, especialmente para los pobres. De hecho, el retrato de la mujer que aborta en EE UU es el de una madre, pobre, soltera, de veintitantos años y con un embarazo muy avanzado.
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