Era casi verano, pero no eran tiempos tranquilos. Mayo y junio de 2021 fueron dos meses complicados para España. Ese 'momento' aglutinó varios temas candentes, con crisis a nivel nacional y exterior, y solo unas semanas antes de la crisis de Gobierno que terminó con la salida de Ábalos, Calvo y Redondo. Y en ese contexto se dio el espionaje al presidente Pedro Sánchez y a la ministra de Defensa, Margarita Robles, a través del software Pegasus. Los datos y los hechos ya se han puesto en manos de la Justicia, tal como anunció este lunes el titular de Presidencia, Félix Bolaños. ¿Cómo estaba España en aquellos días?

¿Qué pasó con los teléfonos de Sánchez y Robles?

Los teléfonos móviles oficiales de Pedro Sánchez y de Margarita Robles fueron 'invadidos' por el software Pegasus, que es la herramienta de ciberespionaje más potente del mundo, desarrollado además por una empresa israelí. Según los últimos datos empezó a utilizarse en el año 2015 en el marco de las agencias de inteligencia y su alto coste hace que solo pueda estar al alcance, teóricamente, de los Estados. Una vez que se implanta en el dispositivo, tiene acceso a toda la información del mismo. En el caso de Sánchez, Pegasus logró hacerse con 2,6 gigas y 130 megas de datos, respectivamente. A esto habría que añadir 9 megas de datos pertenecientes a Robles, tal como confirmó el Gobierno en rueda de prensa.

Los servicios de inteligencia de varios países occidentales han usado Pegasus u otros sistemas de spyware similares y aunque Sánchez es el primer líder que reconoce abiertamente haber sido espiado, hay sospechas de que otros mandatarios han pasado por lo mismo. Es el caso del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, el primer ministro británico, Boris Johnson, y el presidente francés, Emmanuel Macron. En el caso del galo el foco se puso sobre Marruecos, aunque sin pruebas concluyentes sobre su implicación.

¿Qué pasaba con Marruecos?

Los problemas crecían en política exterior. Y es que el 17 y 18 de mayo, España vivía uno de sus momentos de mayor tensión con Marruecos cuando llegaron a las costas de Ceuta 6.000 migrantes como respuesta marroquí al ingreso en un hospital español y bajo identidad falsa del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali. Estos hechos, por ejemplo, acabaron con la destitución de la entonces ministra de Exteriores, Arancha González Laya, y no ha sido hasta hace unas pocas semanas cuando el Gobierno dio por cerrada la tirantez con Rabat con el reconocimiento de su plan para el Sáhara Occidental.

Las relaciones con Marruecos, además, llevaban bastante tiempo siendo delicadas después de que Sánchez rompiera la tradición de hacer a Rabat el primer viaje como presidente del Gobierno y el caso Ghali derivó en la salida de la embajadora de Marruecos que, en ese escenario, habló de que España tendría que "asumir las consecuencias" de haber 'rescatado' al líder del Polisario. Asimismo, la tirantez con el país africano coincidió con unos vínculos endebles con Estados Unidos, principal defensor de la iniciativa marroquí sobre el Sáhara. Los desplantes de Biden a Sánchez se cuentan por varios, más allá de breves encuentros en diferentes cumbres.

¿Y qué sucedía en España en aquel momento?

A nivel nacional, la agenda entonces estaba marcada por un tema sobre los demás: los indultos a los dirigentes independentistas condenados en el marco del procés. La concesión de los mismos se hizo oficial el 22 de junio, coincidiendo con las fechas del espionaje, aunque ya se había anunciado días antes. Precisamente los secesionistas han puesto en duda esa infección de los móviles. 

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"No sabemos exactamente cuánta verosimilitud debemos darle. No sabemos hasta qué punto es víctima del espionaje que ha permitido contra el independentismo", sostuvo el líder de ERC, Oriol Junqueras. Por su parte, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, aseguró que cuando los afectados son los independentistas "todo es silencio y en cambio ahora todo son prisas".

Semanas previas a una crisis de Gobierno

Un mes aproximadamente después de que se registraran estos hechos, el 10 de julio de 2021, tuvo lugar la crisis de Gobierno que dio lugar a la salida de pesos pesados del gabinete de Sánchez como la propia Laya, pero sobre todo José Luis Ábalos, Carmen Calvo o de la hasta entonces mano derecha del presidente, Iván Redondo. Además, mayo había sido el mes del paso autonómico dado por Pablo Iglesias, que dejó la vicepresidencia para ser candidato a las elecciones madrileñas del 4-M.