Los precios de los productos de alimentación se han incrementado notablemente en las últimas semanas y cada vez cuesta más llenar nuestra cesta de la compra. Lo hemos podido ver con el aceite de oliva, de girasol, con otros productos no perecederos como la pasta y con alimentos perecederos como el plátano.
El aumento de los precios es un hecho y ocurre un fenómeno del que alerta la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU): la reduflación. Se trata de "productos que aparentemente no han subido su precio, en realidad sí lo han hecho", ya que los supermercados modifican su envase y te dan "menos cantidad por el mismo precio".
¿Cómo funciona esta técnica?
El alza de precios de las materias primas básicas, el aumento exponencial del coste de la energía y de los combustibles han propiciado que la cesta de la compra se encarezca. "Ante esto, hay quien trata de disfrazar las subidas de precio, usando trucos que no son más que maniobras de distracción para los consumidores: es lo que los expertos llaman "reduflación", que engloba a un conjunto de técnicas pensadas para subir precios sin que el comprador repare en ello", detalla la OCU.
En el último estudio realizado por la organización sobre los precios en los supermercados pudieron comprobar cómo hay productos que en teoría no suben de precio, pero que sí reducen la cantidad en sus envases.
La OCU expone varios ejemplos: el bote de Cola-Cao ha sufrido una reducción de 40 gramos, la margarina Tulipán presenta 50 gramos menos, los yogures Activia tienen 5 gramos menos y los macarrones de la marca Gallo han subido solo un 4,1%.
¿Qué hay que tener en cuenta?
No son los únicos productos analizados. El chorizo de la marca Revilla se vende a un precio de 1 euro, pero antes contenía 80 gramos de producto y ahora 70 gramos. Lo mismo sucede con Campofrío, que vendía por 1 euro un envase de 110 gramos de jamón cocido y ahora es de 100 gramos.
No obstante, al consumidor lo que le llama la atención es "el símbolo de un euro, destacado claramente en el envase". Las empresas logran su objetivo, que es aparentar un producto realmente económico.
Por ello, la OCU recomienda revisar aquellos productos que añadimos a nuestro carro de la compra y que aparecen con etiquetas como "oferta", "descuento" o "promoción especial. Hay que comparar el precio por la unidad de medida, para así saber cuál es la alternativa más económica.
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