Alberto Núñez Feijóo diseña la creación de una Oficina del Presidente, un organismo ajeno a la estructura del PP y con el funcionamiento al uso de un think tank, a través del cual recoger las aportaciones de personas sin implicación en la política activa pero con interés en la misma y una carrera profesional de éxito. Un "comité asesor", según describen desde el equipo del presidente gallego y próximo líder del PP, encargado de "canalizar aportaciones" y un vehículo de entrada al programa electoral y al ideario del partido.

La idea nace del aluvión de llamadas recibidas por Feijóo en las últimas semanas, una vez aclarado el camino hacia la séptima planta de Génova 13. Llamadas del mundo del sindicalismo, de la diplomacia, de agentes externos e internacionales y de otros partidos políticos de un "perfil elevado". La intención es conformar "un sanedrín, un comité de sabios, un consejo de expertos" en los que Feijóo se pueda apoyar para abordar la actualidad con mayor minuciosidad. Se trata, además, de que no sea usado como un trampolín con el que aterrizar en el partido.

Integrado por profesionales independientes de la sociedad civil sin carné del partido, con miembros fijos pero con una estructura dinámica, su actividad se aliñará con la participación de "personas integradas en el presente o en el pasado reciente" del PP y con colaboraciones externas. Una de las notas fundacionales sería, además, la búsqueda de una transversalidad ideológica con la que nutrir al partido. 

Desde el equipo del presidente insisten en el perfil "apolítico" que tendría el sanedrín, que sería un canal de "comunicación directo" sin un encaje en la estructura tradicional del partido con el que "compartir impresiones" sin que trascienda el contenido de las reuniones públicamente. Es decir, sin fotos en redes sociales, sin notas ni ruedas de prensa que atestigüen los encuentros. 

También "servirá para buscar soluciones políticas desde fuera de la política", con el que el próximo presidente del Partido Popular buscará "nuevos enfoques" e individuos que "puedan ofrecer puntos de vista diferentes o complementarios". La intención de Feijóo es diseñar un "órgano discreto" y sin "perfil comunicativo". Porque, si bien se contempla la posibilidad de que participen hasta ex ministros, lo que no quiere Feijóo es convertirlo en un trampolín con el que alcanzar puestos de responsabilidad en el gobierno

"Aunque la Oficina tendrá un clara componente económico, también servirá de punto de encuentro en propuestas de otra naturaleza de tipo social o incluso de política internacional", explican desde el equipo del presidente gallego sobre un proyecto con el que esperan "atraer talento" y "recibir aportaciones programáticas de alto nivel".