La Roca, como la gran mayoría de los programas de actualidad, abordó este domingo el conflicto en Ucrania. Para ello contó con Elena Panasyuk, una mujer ucraniana que vive en España y que ha viajado a Polonia de la mano de la Fundación Madrina para, junto con 30 voluntarios, recoger a 250 refugiados, madres y niños. 

Elena contó que, aunque el viaje fue complicado, lo han hecho "con mucha ilusión" y que volverán mejor de como han ido, con "250 esperanzas". "Hace falta mucha organización, porque la situación de la gente de Ucrania que está cruzando la frontera es catastrófica, aunque aquí en Varsovia está todo tranquilo, pero en la zona de la frontera hace falta mucha ayuda, pero falta logística", explicó.

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Nuria Roca conoce personalmente a Elena, que lleva cuatro días sin saber nada de su padre, de 80 años, que vive en Irpin, y que ha decidido no abandonar el país. "Nació en 1942, en la guerra, y va a morir con la guerra, no quiso moverse", explicó Panasyuk.

Según relató la valenciana, su amiga ucraniana vivió muy de cerca el horror de Chernóbil, ya que su padre era técnico nuclear la central nuclear y ella y su hermana fueron evacuadas. "Están acostumbradas a vivir la tragedia, siempre se reponen", contó a los espectadores la presentadora.

"Yo ahora no pienso en nada, simplemente voy paso a paso, hago lo que tengo que hacer, y luego ya reflexionaré sobre todo", aseguró Elena, provocando la emoción en plató, especialmente de Nuria, que no puedo evitar romper a llorar. "Suerte", alcanzó a decir.

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"Ya, mi niña, ya, en 40 horas ya estamos de vuelta", trató de consolarla la entrevistada, que también ha terminado emocionándose. "Todo va a salir bien, estoy segura", prosiguió Panasyuk.

"Esto es lo que sucede cuando conoces de primera mano los testimonios", señaló Nuria Roca ante el silencio de los colaboradores en plató.