El cadáver de una ballena de unos nueve metros de longitud ha aparecido este jueves por la mañana en la playa de La Rada. La expectación ante el acontecimiento ha sido máxima en el municipio malagueño de Estepona, donde se han agolpados cientos de personas cubriendo con sus teléfonos móviles todo el proceso de la retirada del cetáceo desde el agua hasta el espacio habilitado para que los científicos continúen con el análisis pertinente del animal y la causa de su muerte.

Una vez hallado el cuerpo de la ballena, se ha dado la voz de alarma a las autoridades que, a través del Ayuntamiento de la localidad, han contratado un servicio de maquinaria especializada para recoger el cadáver del agua.

Posteriormente, los técnicos del Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazadas (Crema) y los agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía han analizado a la criatura. El cetáceo en cuestión era un ejemplar macho de rorcual común, uno de los más habituales en el Mediterráneo. Medios y transeúntes han relatado el transcurso de los hechos por redes sociales. 

Finalmente, después de que los profesionales tomaran muestras del tejido muscular del mamífero el cadáver de la ballena ha sido trasladado por la compañía contratada para dichas tareas a un espacio autorizado para su custodia.