Llegan las temperaturas más bajas del año y por ello, nosotros recurrimos a prendas de abrigo y mantas para protegernos. Pero, ¿qué pasa con nuestros perros? Tienen que seguir saliendo a pasear, aunque fuera las temperaturas se desplomen.

Tal y como recoge el portal Urgencies Veterinaries, la temperatura corporal media normal en perros es de 38 a 39 ºC. Por debajo de ese rango, el perro puede estar sufriendo un episodio de hipotermia. 

La hipotermia es peligrosa, porque supone que el perro pierde más calor del que es capaz de generar, y afecta más a los perros pequeños. A partir de los 34 ºC se pueden manifestar síntomas como calambres y temblores. 

Si la temperatura corporal sigue bajando, el animal puede mostrar síntomas como apatía, se podrá observar una postura corporal forzada, pulso y respiración débiles e inquietud.

Si la temperatura del cuerpo de nuestra mascota cae por debajo de los 31 ºC y no hay una intervención rápida por nuestra parte o por la de un veterinario, la muerte del animal es inevitable.

Para poder sacar al perro con temperaturas muy bajas, podemos recurrir a ropa de abrigo e incluso botas para sus patas. 

El año pasado, la Dirección General de Derechos de los Animales del Gobierno de España editó una infografía sobre las temperaturas que pueden representar un riesgo para los perros, en función de su tamaño. No obstante, hay otros factores como la raza o el pelaje.

En el caso de los perros pequeños y medianos, una temperatura exterior de -4 ºC puede resultar peligrosa, mientras que en el caso de los perros de gran tamaño, el peligro se sitúa en los -6 ºC.