La Policía ha abierto una investigación para esclarecer las causas por las que se produjo el accidente en un castillo hinchable de Mislata (Valencia), levantado varios metros del suelo por una ráfaga de viento, lo que ha costado la vida a una niña de 8 años y heridas a otros ocho menores. De esta forma también se pretende determinar las responsabilidades, si las hubiera, de la empresa de montaje de la feria.

Muere una de las niñas heridas en Mislata tras salir volando un castillo hinchable

El Ayuntamiento de la localidad, que ha declarado luto oficial hasta el viernes y ha suspendido todos los actos municipales previstos, incluyendo la cabalgata de Reyes Magos de esta tarde, ha puesto a disposición de la Policía Nacional toda la documentación administrativa sobre la instalación, que certificaba el montaje de las atracciones feriales.

Esta incluye el certificado de inspección anual de la atracción; el certificado final de instalaciones emitido por un ingeniero colegiado aportado por la empresa que gestiona la feria, tal como exige la normativa vigente; el seguro de responsabilidad civil, la declaración responsable, el proyecto y el plan de emergencia.

Cómo saber si un castillo hinchable es seguro

Los castillos hinchables son una de las atracciones preferidas de los niños, pero si no cuentan con las medidas necesarias de seguridad, se pueden producir accidentes como este.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha facilitado a 20 minutos una serie de claves que los padres pueden tener en mente a la hora de revisar a simple vista la instalación. Si se aprecia que alguno de estos aspectos no se cumple, la organización recomienda abstenerse del uso del castillo.

1. El viento. Al tratarse de elementos hinchables pesan poco y un viento de 15km/h ya puede moverlos, con el peligro de caída que esa circunstancia entraña. Jamás se debe tener un castillo abierto si el viento supera los 38 km/h.

2. Anclaje. Deben estar bien anclados, pero con anclajes planos y que no sobresalgan. Si no es posible, deben usar sacos de arena.

OCU

3. Requieren vigilancia. En todo momento debe haber al menos dos monitores supervisando la atracción (uno solo no basta por las dimensiones del castillo).

4. Espacio libre alrededor. Se recomienda que haya perímetro mínimo de 2 metros que se amplía a 3,5 metros en los laterales abiertos.

5. Turnos por edades o estatura. El objetivo es que no usen la atracción al mismo tiempo niños de constitución muy diferente. Si un menor de 13 o 14 años cae encima de otro de cinco podría causarle mucho daño.

6. Colchonetas o espuma en los accesos. En el acceso al castillo tiene que haber una rampa que debe cubrir toda la anchura del arco de entrada. Deben poner algún material que amortigüe posibles caídas (no vale con una simple moqueta) y en esa zona no puede haber bordillos ni bancos ni árboles ni postes...

7. Papeles en regla. En el castillo debe figurar que se cumplen los requisitos de la normativa EN14960. También tiene que haber una placa identificando la potencia del hinchador a utilizar, los usuarios (tanto su número máximo como su altura mínima), el año de fabricación y la dirección de la empresa responsable. La atracción debe contar con un seguro de responsabilidad civil y licencia de actividad. Es indispensable que cualquier particular que quiera contratar la instalación de estas atracciones se asegure de la existencia de estos seguros y permisos.

8. Hinchado uniforme. La atracción debe estar hinchada correctamente por todas sus parte, prestando especial atención a su firmeza en la zona de acceso y salida (donde es más peligroso que los niños pierdan el equilibrio) y las zonas más altas (donde los niños tienden a apoyarse en los parapetos).

9. Hinchador apartado. Como mínimo 1 metro de espacio libre a su alrededor y con el tubo bien extendido.

10. Instalación eléctrica no accesible al público. Los elementos eléctricos deben estar situados en zonas donde las personas congregadas ajenas a la atracción no puedan acceder.