La recogida de residuos puerta a puerta es una fórmula todavía minoritaria en València. Sin embargo, la implantación desde hace unos años de cuartos de basuras en el interior de los edificios de nueva construcción ha permitido eliminar de las calles alrededor de 500 contenedores, lo que redunda no solo en una mayor calidad paisajística, sino en menos olores y ruidos.

En concreto, según los datos de la Concejalía de Gestión Sostenible de Residuos Urbanos del Ayuntamiento de València, son 120 los edificios de la ciudad que ya disponen de estas cámaras de basuras en su interior, lo que, a razón de una media de cuatro o cinco depósitos por bloque, ha permitido eliminar alrededor de medio millar de contenedores de las calles en las que se ubican. Estos cuartos de basuras disponen, además, de las cinco fracciones de recogida selectiva para su posterior reciclaje: papel y cartón, envases, materia orgánica, vidrio y resto.

Según consta tanto en la ordenanza municipal de Limpieza como en el código técnico de la Edificación de 2006, los nuevos bloques de viviendas que se construyen en la ciudad tienen la obligación de construir estos habitáculos. La única excepción es el distrito de Ciutat Vella, donde está implantado el servicio puerta a puerta.

Las zonas de la ciudad "libres de contenedores" coinciden, por lo tanto, en su mayor parte con los nuevos desarrollos urbanísticos o PAI (programas de actuación integrada), por ser los que más edificios de nueva construcción acumulan. Así, barrios como Malilla, Nou Benicalap, Nou Campanar, Patraix, Rascanya, Moreras, Quatre Carreres o La Torre han visto disminuir el número de contenedores en las calles a raíz de la proliferación de cuartos de basuras en el interior de las nuevas edificaciones.

Ayto. VLC

El mecanismo de recogida de los residuos bajo esta fórmula ‘finca a finca’ es sencillo y no se diferencia de la que se practica habitualmente en las calles. Los operarios de las contratas municipales, que en este caso también se dividen en las tres zonas del conjunto de la ciudad, disponen de una llave para acceder a estos cuartos desde el exterior. De este modo, sacan los contenedores y los llevan al camión, donde los vacían, y los devuelven al interior de los edificios.

Además de los 120 edificios residenciales, otros 152 inmuebles de València disponen de cuartos de basuras. Se trata de supermercados y otras edificaciones no residenciales, como hoteles, lo que eleva la cifra total a 272 inmuebles, según los datos del Ayuntamiento.

Las ventajas de reducir el número de contenedores de las calles están relacionadas tanto con la calidad paisajística de los barrios como con la mejora de la calidad ambiental, al reducirse los malos olores y la contaminación acústica derivada de los trabajos de recogida. Además, permite aumentar el número de plazas de aparcamiento.

La otra cara de la moneda, como sucede en ocasiones con los contenedores situados en la vía pública, tiene que ver con la acumulación de desechos cuando la producción de residuos se dispara, como sucede con las fiestas navideñas y de Reyes, o con la falta de frecuencia en el paso de los operarios, lo que provoca molestias a los residentes de estos edificios.

Nuevo contrato de recogida 

Precisamente, el Ayuntamiento acaba de sacar a concurso el nuevo contrato de limpieza viaria, recogida y transporte de residuos urbanos de la ciudad de València, uno de los de mayor cuantía del Consistorio, dotado con 1.325 millones de euros para un periodo de 15 años (2022-2036). Este documento incluye las distintas formas de recogida y transporte de residuos ya vigentes en la ciudad, entre las que figuran los más de 22.700 contenedores de selectiva y resto, las plataformas móviles de Ciutat Vella, el ‘puerta a puerta’ en hostelería y comercios, la recogida de muebles y objetos, de aceite doméstico, ropa usada y pilas, los ecoparques móviles y los mencionados cuartos de basuras en viviendas.

Renovación de vehículos y depósitos

El contrato de recogida de residuos y limpieza urbana que acaba de licitar el Ayuntamiento de València incluye, como criterios de valoración (que supondrán hasta 49 puntos), la renovación del parque de vehículos y del parque de contenedores de la ciudad. En el primer caso, apuesta por camiones más ecológicos. Por lo que se refiere a los depósitos, las mejoras propuestas tienen que ver con la mayor accesibilidad. Así, las licitadoras podrán conseguir hasta 5 puntos por la aportación de contenedores nuevos.