La magistrada del juzgado de instrucción 2 de Badalona (Barcelona) ha abierto una investigación por la muerte de un joven 24 horas después de recibir la descarga eléctrica de una pistola Táser por parte de los Mossos d'Esquadra durante una intervención el pasado viernes en la localidad.
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha informado este jueves en un comunicado que la jueza abrió las diligencias el pasado domingo, cuando se le comunicó desde el hospital el fallecimiento del joven.
También ha solicitado informes al cuerpo policial a la espera de recibir el informe completo de la autopsia, aunque por ahora "no hay ninguna persona en calidad de investigada en la causa".
Fuentes de la Conselleria de Interior de la Generalitat han informado a Europa Press que el viernes la policía catalana recibió el aviso a través del teléfono de emergencias 112 de que un hombre se encontraba "en actitud amenazante con cuchillos".
Varios agentes se desplazaron hasta el lugar de los hechos y, tras recibir la descarga, el hombre fue trasladado estable al hospital y murió 24 horas más tarde a causa de un paro cardíaco.
Las mismas fuentes han remarcado que la Táser se utilizó "siguiendo los protocolos", puesto que los agentes le avisaron de que la utilizarían y el hombre no cesó sus amenazas.
El Síndic de Greuges investiga el uso de la pistola Táser
El Síndic de Greuges ha abierto una investigación después de tener conocimiento de que un hombre murió 24 horas después de recibir la descarga eléctrica de una pistola Táser por parte de los Mossos d'Esquadra durante una intervención el pasado viernes en Badalona (Barcelona).
En un comunicado este jueves, han explicado que los agentes fueron requeridos por parte de dos miembros de la familia "que estaban retenidos en el interior del domicilio y amenazados por la víctima, que disponía de dos armas blancas".
La policía catalana accedió a la vivienda y ante el "peligro inminente tanto para la familia como para los agentes", hicieron uso del dispositivo, y el hombre fue trasladado estable hasta el hospital, donde sufrió una paro cardiaco un día después.
El Síndic de Greuges ha obtenido información de los responsables de la Conselleria de Interior y se ha dirigido a la Dirección General de la Policía para pedir una copia de la investigación y de las conclusiones.
En noviembre de 2020, el Síndic de Greuges también abrió una actuación de oficio a raíz de la reducción con una pistola Táser de una mujer en la entrada de un centro médico, y concluyó que "la decisión de hacer uso de la pistola se ajustó a lo que establece el protocolo sobre las situaciones en las que se pueden utilizar estos dispositivos".
Sin embargo, también concluyó que la descarga eléctrica "no fue adecuada ni ponderada", y que disparar seis veces a una mujer en las circunstancias en las que se encontraba no se ajustaba a los criterios de congruencia, oportunidad y proporcionalidad de las intervenciones policiales, en sus palabras.
En enero de este año, el Síndic presentó un informe en el que pedía que el protocolo de uso de las pistolas eléctricas estableciera el "número máximo de veces que se podía apretar como garantía de seguridad" y que prohibiera su utilización en manifestaciones, concentraciones y menores de 18 años.
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