Ha sido un año complicado a todos los niveles para Ainhoa Arteta. Sin embargo, parece que, poco a poco, su situación empieza a mejorar. Ha sido la propia artista quien lo ha confirmado este lunes a través de un post en Instagram.

La soprano ha reaparecido en la red social tras casi un mes de ausencia para dar una buena noticia: "Por fin puedo decir que ya la mejoría es muy evidente y que falta muchísimo menos para poder estar con todos vosotros".

Lo cierto es que han sido meses muy largos para la artista, que el pasado verano sufría una inflamación de las venas dentro de las rótulas, por lo que tuvo que entrar en una cámara hiperbárica. Tres meses antes había contraido la Covid-19.

El pasado 23 de julio se conoció que Arteta había sufrido un colico nefrítico que le tuvo diez días en la UCI, temiendo por su vida en coma inducido durante seis jornadas. La totalidad de sus conciertos se cancelaron.

Después, a finales de agosto, cuando le dieron el alta, la cantante lírica lanzó un emotivo mensaje a través de su Instagram en el que agradecía el apoyo recibido. Sin embargo, cuando todo parecía ir bien, en septiembre se conoció había sufrido un paro cardiaco de larga duración que le había provocado que se gangrenarán sus extremidades.

Dada la gravedad de la situación, los médicos decidieron amputarle parte del dedo índice de la mano derecha y un dedo del pie derecho. "Lo más importante es que me salvé", dijo por aquel entonces.  

A sus problemas de salud se sumaron, además, sus altibajos en el plano sentimental. Tanto fue así que tras cumplirse dos años de su boda en Cádiz decidió separarse de Matías Urrea. Unas semanas más tarde se informó que nunca habría habido boda ni que su expareja fuera, en realidad, su marido. 

A partir de ese momento, Arteta empezó a copar los titulares de la crónica social y, ahora que parece que todo está más calmado, parece que todo vuelve a la normalidad.