Fayna Bethencourt, obligada a cerrar su negocio: "Se ha ido mi economía por los desagües"

Fayna Bethencourt, en 'Sálvame'.
Fayna Bethencourt, en 'Sálvame'.
MEDIASET
Fayna Bethencourt, en 'Sálvame'.

Fayna Bethencourt se ha visto obligada, muy a su pesar, a cerrar su peluquería, Première Salón, tal y como ha anunciado ella misma a través de un comunicado en Instagram. La exconcursante de Gran Hermano peleó hasta el final por sacar su negocio adelante, pero no ha podido ser. "Lo hicimos incluso en tiempos de pandemia. Se nos vio la venilla Kamikaze", ha avanzado.

"Cuando echas el cierre se te pasan un montón de cosas por la cabeza, la primera es el día que levantaste esa persiana con toda la ilusión por sacar tu negocio adelante y conseguir que un proyecto que se inició con todas las ganas de hacer algo bueno se convirtiera en una alegría para la vida de muchas personas", ha contado en su última publicación.

El rostro de Telecinco afirma que ha cerrado "un ciclo con pena y cierto alivio a la vez". "Ahora toca dar las gracias, porque hemos sido varios los componentes de Première y no me quiero dejar a nadie", ha apuntado, mencionando a sus padres, quienes la ayudaron económicamente a levantar el proyecto; así como a su pareja, Misael, y a los peluqueros David, Saskia y Monica, a los que tuvo que despedir al no poder pagar las facturas.

"Fueron cayendo de uno en uno en una especie de juego del Calamar involuntario, porque cuando no hay, toca recortar gastos y en esta aventura empresarial tuve que aprender lo que es decirle a un empleado que no puedes seguir teniéndolo en tus filas, porque simplemente no hay para tanto gasto. Eso duele. A la que despide y al despedido", ha valorado al respecto.

David fue quien aguantó prácticamente hasta el final, siendo la primera persona que escuchó a Bethencourt pronunciar la frase "Mañana no abriremos Première Salón": "Cuando vas dejando gente atrás se te corta el aliento, pero sigues caminando con la esperanza de poder coger carrerilla y recuperarte para poder seguir avanzando con el negocio que intentas sacar adelante".

Para Bethencourt la vida "no es una película", aunque sí se escapa de lo que pueden contar muchos "guiones". Tiene cosas buenas, pero también malas. "Se acabó esta historia, pero vendrán más, porque la vida es así y siempre hay continuación hasta después de los últimos créditos que salen en la pantalla", ha zanjado, recibiendo una oleada de apoyo por parte de sus cientos de seguidores.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento