La moda de los 2000 vuelve a estar en plena tendencia y las películas de la década son una gran fuente de inspiración para conseguir los mejores looks Y2K. Las celebs tampoco escapan a ella y recurren a las grandes comedias románticas para sacar los mejores estilismos, como ha hecho Ariana Grande.

Aunque ya vimos a la cantante con estilismos que recordaban a los personajes de Mean Girls o Una rubia muy legal en sus videoclips, esta vez Ariana ha sacado estos outfits a la calle en el programa de The Voice.

Grande es coach en la edición norteamericana del programa y ayer se sentó en el sofá giratorio con un vestido bastante familiar, y es que ese mismo modelo lo llevó Jennifer Garner mientras bailaba Trhiller en película El sueño de mi vida, que se estrenó en 2004.

Este vestido arcoíris pertenece a la colección Primavera 2003 de Versace y es ajustado al pecho, con un cut-out bajo el busto y con tirantes glitter que lo convierten en toda una pieza de culto.

Aunque en la película Jennifer Garner lo lleva con un colgante de mariposa -muy en tendencia este otoño- la cantante ha querido dejar todo el protagonismo al vestido. No obstante, lo que también ha lucido han sido los pendientes largos de cristales y la sombra rosa pastel que también lleva la protagonista de El sueño de mi vida.

El broche de oro lo pone el moño con las puntas disparadas que le da todo ese toque dosmilero. Siguiendo con el homenaje a la película, tampoco podían faltar las numerosas pulseras y los tacones azules, eso sí, adaptándose al estilo de Ariana.

Sin duda, la cantante ha fascinado con uno de los mayores iconos de su infancia, volviendo a traer del baúl de los recuerdos una de las mejores escenas de todas las comedias románticas de la década de los 2000.