El Ayuntamiento de Barcelona cerrará las tiendas de conveniencia, conocidas como tiendas 24 horas, que vendan alcohol fuera del horario marcado legalmente o a menores. El primer teniente de alcaldía, Jaume Collboni, ha explicado en declaraciones en Catalunya Ràdio que aplicarán "mano dura y tolerancia cero". 

Ha recordado que la normativa establece un límite horario para vender alcohol, hasta las 23.00 horas en verano, pero también la prohibición de venta a menores. En este sentido, ha dicho que están constatando que muchas de estas tiendas "se saltan la prohibición". Hay un régimen sancionador con multas de 20.000 a 500.000 euros, pero Collboni ha asegurado que darán un paso más y cerrarán aquellas que incumplan la normativa.

El teniente de alcalde ha explicado que los informes jurídicos de que dispone el Consistorio apuntan que pueden aplicar estos cierres si hay un incumplimiento del límite horario o si venden alcohol a menores.

Collboni ha considerado que si el ocio nocturno hubiera estado abierto, habría "quitado presión" durante las fiestas de la Mercè. Ha defendido también que una concentración de personas como las de los macrobotellones de este fin de semana no se había producido antes.

El teniente de alcaldía Jaume Collboni ha pedido no normalizar los botellones y ha dicho que las autoridades públicas no tienen que hacer de "comentaristas", sino apoyar a los cuerpos policiales y a los operativos que se organicen

Ha rechazado, sin embargo, que el Ayuntamiento no estuviera trabajando sobre este tema y ha puesto como ejemplo que entre junio y agosto se han puesto 11.000 sanciones para incumplir la ordenanza de civismo y se ha desalojado más de 250.000 personas. 

El teniente de alcaldía ha pedido no normalizar los botellones y ha dicho que las autoridades públicas no tienen que hacer de "comentaristas", sino apoyar a los cuerpos policiales y a los operativos que se organicen.

Ha confirmado que se ha incrementado la actividad inspectora en estos establecimientos aunque la medida no tiene aún calendario, aunque "ya hay instrucciones para que se ponga en marcha lo antes posible", ha dicho Collboni.

Ha recordado que las sanciones por las infracciones por la venta de alcohol fuera del horario y por su venta a menores, van "desde los 20.000 al medio millón de euros en los casos muy graves". 

Por su lado, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha reconocido que los botellones del fin de semana pasado por La Mercè estaban formados en su mayoría por jóvenes que querían divertirse, pero que también contaron con personas con "actitudes violentas y delincuenciales protagonizadas por personas que se aprovechan de la masa para buscar impunidad".