Una veintena de personas han pasado la primera noche de la acampada organizada en la plaza Sant Jaume de Barcelona por la plataforma Somos Ocio Nocturno para reclamar un calendario claro para la reapertura del sector.

Las veinte personas han acompañado a las cuatro que este miércoles por la tarde iniciaron una huelga de hambre indefinida hasta que las Conselleries de Interior y Salud de la Generalitat les den una respuesta.

La plataforma Somos Ocio Nocturno, que agrupa a distintas entidades del sector en Cataluña, entre ellas la Federación Catalana de Locales de Ocio Nocturno (Fecalon), inició la tarde de este miércoles una acampada en la plaza de Sant Jaume de Barcelona contra la decisión del Govern de mantener cerrados los locales como consecuencia de la Covid-19. 

La organización ha leído un manifiesto con el que ha exigido a la Generalitat de Catalunya "poner fin al agravio comparativo y dejadez de funciones, recuperar el derecho a trabajar bajo unas condiciones justas y jurídicamente seguras", recuperar su horario y "acabar con la limitación" de sus "derechos fundamentales y constitucionales". Los trabajadores del ocio nocturno también han pedido "dejar de ser utilizados como cabeza de turco mediáticamente, menoscabando la imagen y opinión pública sobre el sector".

El secretario general de Fecalon, Fernando Martínez, ha cifrado en "unas 400" las personas que se han reunido en Sant Jaume desde este miércoles.

Martínez ha lamentado que los trabajadores del ocio nocturno son "los grandes olvidados de la administración" y que el sector sufre una "agonía crónica", y ha pedido a la Generalitat una "hoja de ruta" para que puedan reabrir "bien" y no les "hagan culpables de una posible sexta ola de coronavirus".

FECALON

La plataforma, que además de a Fecalon integra al Gremio de Discotecas de Barcelona y Provincias y España de Noche, ha criticado que "han pasado 17 meses desde el inicio de la pandemia del Covid-19 y la situación actual del sector del ocio nocturno en Cataluña sigue siendo devastadora". 

El secretario general del Gremio de Discotecas, Ramon Mas, ha pedido al Govern que deje hacer el trabajo a los empresarios y se les dé "herramientas" para hacerlo bien. Una de estas es el certificado Covid, que acredita que las personas han pasado la enfermedad, tienen la pauta de vacunación completa o disponen de un test negativo antes de entrar al local. El objetivo es minimizar el riesgo de contagio y garantizar así una reapertura "controlada" del sector.

"Hemos sido pacientes, responsables y comedidos; aguantando una injusticia e incertidumbre imposibles de soportar. Hemos esperado nuestro turno para poder continuar con nuestras vidas y que nuestros derechos, nos fueran devueltos. 17 meses después, decimos basta", han afirmado en el manifiesto los miembros de la plataforma.

También han señalado que el sector "sigue siendo castigado, criminalizado y aplastado, de forma exclusiva hoy en día", pues es el único "cerrado en interiores y con restricciones que imposibilitan, a todas luces, la viabilidad de los negocios y que además, no se sustentan bajo argumento sanitario alguno".

"Han arruinado nuestras empresas. Nos han robado el derecho a trabajar. Nos han quitado nuestro sustento y medio de vida. Y, además, nos han destrozado emocional y psicológicamente, al arrasar con nuestra vocación e ilusión", han continuado.

También han lamentado que han "sido utilizados de forma constante como cabezas de turco de uso político" y que se realizan infinitas fiestas ilegales y se reproduce" su actividad "en otros locales sin licencia para ello, con total impunidad".

Hace casi un año, Somos Ocio Nocturno ya convocó una acampada en la plaza de Sant Jaume, en la que participaron cerca de un centenar de personas, para pedir la reapertura del sector. Sin embargo, la protesta fue desalojada al cabo de una semana.

Pendientes del TSJC

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) debe pronunciarse sobre el cierre del ocio nocturno después de que el Govern presentara este martes las alegaciones para justificar las restricciones en este sector y la restauración.

A pesar de que desestimó las medidas cautelarísimas solicitadas por la patronal del ocio nocturno Fecasarm contra la prórroga de las restricciones que afectan a los horarios de la restauración y a los interiores de discotecas, el TSJC dio un plazo de dos días a la Generalitat para defender sus medidas.